Este miércoles finalmente se aprobó el veto presidencial a la ley de usurpaciones, que tuvo un largo y arduo debate en ambas Cámaras.
Durante esta jornada de miércoles, la Cámara de Diputadas y Diputados aprobó el veto presentado por el Gobierno a la Ley de Usurpaciones.
Recordemos que, previamente, en el Senado se aprobaron 13 de las 14 modificaciones propuestas, donde la única eliminada fue la de legítima defensa privilegiada.
Finalmente, será una realidad esta ley, luego que la promulgue el Ejecutivo tras un largo camino y ser bastante debatido en ambas Cámaras.
Veto presidencial
Durante la jornada de ayer, el veto presidencial corría peligro de ser rechazado, pero sin duda uno de los elementos que marcó la jornada y que de alguna manera cambió la dinámica de las votaciones, de las reuniones y de las conversaciones, fue la definición que tomó el Partido Republicano de apoyar al veto del Gobierno. Todo esto a pesar de que se oponían a la facultad presidencial.
A raíz de esto, se dejó fuera de juego a Renovación Nacional y la UDI, que habían resuelto oponerse en totalidad a la iniciativa, para que así se generaran las condiciones de un proyecto de ley con problemas de aplicación. Además, se generaba el impulso político para presentar un proyecto nuevo de usurpaciones, cosa que de todas maneras van a hacer.
El diputado de RN, Diego Schalper, dijo durante esta mañana, que lo que debió hacer toda la derecha era oponerse al veto presidencial en cada una de las catorce votaciones, situación que evidentemente no ocurrió.
“(…) Para nosotros es lamentable que algunos colegas no hayan visto en esto una verdadera encerrona jurídica que no es aceptable.
El veto es una herramienta extremadamente agresiva en una democracia”, comentó el parlamentario.
En tanto, la bancada del Partido Republicano, en su mayoría y en casi todas las votaciones, resolvió apoyar al Ejecutivo bajo la tesis de que no se podía seguir esperando por una ley de usurpaciones y que un proyecto de oposición, por mucho que tuviera apoyo, iba a tardar en tramitarse y, por lo tanto, las personas de La Araucanía, de la Macrozona Sur, seguirían esperando una resolución legislativa de este tema.
El diputado independiente del Partido Republicano, Mauricio Ojeda, quien representa a La Araucanía, envió un mensaje encarecido minutos antes de la votación a sus colegas, de que no se resistieran al veto y que entendieran que este era el camino más razonable para destrabar estas diferencias.
“La Araucanía y el sur de Chile están literalmente hoy contra la espada y la pared a propósito del veto a la ley de usurpaciones. No se puede caer esta ley, pero no podemos darnos el lujo de rechazar, porque dejaríamos a toda la gente en la indefensión. Les pido que recapaciten y que piensen en las víctimas”, manifestó en su oportunidad.
Veto a la ley de usurpaciones
El Partido Comunista votó en contra de algunas de las observaciones, como siempre prometió que lo iba a hacer.
Esto, pese a que hasta los últimos minutos había tratativas intensas en donde se involucró la ministra vocera de Gobierno, Camila Vallejo, y su equipo, donde estuvo la Segpres, Interior, e incluso el Ministerio de Desarrollo Social.
Todos tratando de conversar, de negociar, para ver si podían cambiar de opinión o no estar en la Sala. Pero los comunistas optaron por el camino que optó Daniel Núñez y Claudia Pascual, es decir, estar en la Sala y mostrar sus diferencias con el Ejecutivo de una iniciativa que, recuerdan, no es del programa de Gobierno, que es una moción parlamentaria y que el Ejecutivo quizás nunca debió comprometerse en el marco de la agenda de seguridad a respaldar esta propuesta.
El diputado independiente PPD, Jaime Araya, señaló que “el veto va a arreglar la ley de usurpaciones que hoy día, como salió del Congreso, es un peligro para nuestro país. Propone en el texto una serie de mejoras que van a hacer de esto una ley que permita detener a quienes están usurpando. Habilita la actuación de las policías”.
En tanto, la ministra del Interior, Carolina Tohá, agradeció y valoró que “en el transcurso de este debate, los argumentos que hemos ido instalando, han logrado concitar un apoyo mayoritario en ambas Cámaras”.
“Queremos recordar que tanto en el Senado como en la Cámara de Diputados, la enorme mayoría, trece de catorce observaciones que hizo el Presidente de la República, se aprobaron con una mayoría que no hizo necesaria recurrir a las normas excepcionales que tiene el veto”, añadió la secretaria de Estado.