Tras un periodo de vacancia de cinco meses, y su elección en el pleno del Senado el pasado 24 de octubre, el abogado inició hoy su gestión a la cabeza de la institución autónoma de Derechos Humanos.

Este lunes asumió el abogado Anuar Quesille Vera como nuevo Defensor de la Niñez, a cargo de liderar esta institución autónoma de Derechos Humanos, especializada en niñez y adolescencia, por los próximos cinco años.

Recordemos que tras el término del periodo de Patricia Muñoz, el cargo estuvo vacante por 5 meses, tiempo en el que asumió interinamente la directora de la Unidad de Protección de Derechos y Representación Judicial, Giannina Mondino.

Fue esta última quien, en un hito simbólico, entregó al nuevo Defensor un documento con la información de la gestión de las distintas unidades, sedes y áreas de la institución, para el comienzo de su trabajo en el cargo.

Respecto a las prioridades programáticas, Anuar Quesille destacó que la idea es poner a los niños, niñas y adolescentes en el centro de las gestiones institucionales. “Hoy nos encontramos frente a tres grandes escenarios”, dijo.

Los desafíos del nuevo Defensor de la Niñez

“En primer lugar, debemos considerar las situaciones urgentes, en temas de educación, de niños, niñas y adolescentes privados de estar con sus familias”, comentó.

Agregando que “en temas de seguridad pública, donde se requieren acciones concretas para lograr que las instituciones del Estado, que tienen un mandato en esas materias, puedan entregar respuestas acordes, pertinentes y oportunas”.

En segundo lugar, Quesille apuntó a la operacionalización de la Ley de Garantías: “Actualmente el Estado se encuentra en un proceso de instalación de esta nueva institucionalidad”.

“Para ello la Defensoría de la Niñez juega un rol protagónico para supervigilar, monitorear y trabajar colaborativamente en la llegada al territorio de este Sistema de Garantías”, indicó.

Finalmente, el Defensor de la Niñez explicó que el tercer punto para priorizar es “abrirnos a nuevos temas, temas contingentes y contemporáneos que alcanzan otras dimensiones de las vidas de niños, niñas y adolescentes”.

Situación educacional en Atacama

Al ser consultado sobre el extenso paro docente que afecta a la región de Atacama, el Defensor de la Niñez declaró que “es muy preocupante, urgente, no puede esperar”.

Agregando que “son más de 60 días que los niños, niñas y adolescentes de la región no pueden ir a clases, por lo tanto, no se les está garantizando el ejercicio de su derecho a la educación”.

“La Defensoría de la Niñez ha realizado una serie de acciones de coordinación e intermediación para que este derecho pueda ser reestablecido. Estamos evaluando las siguientes acciones que adoptaremos en caso de que esto perdure”, concluyó.