El Servicio de Biodiversidad y de Áreas Protegidas será creado tal y como está el proyecto, esperando aún la ratificación de ambas salas del Congreso Nacional.
En una extensa y controvertida sesión, la Comisión Mixta para la creación del Servicio de Biodiversidad y Áreas Protegidas (SBAP), terminó rechazando, a través de dos empates, la propuesta del Gobierno para definir la exclusión de concesiones pesqueras.
Fue una propuesta de artículo transitorio del Ejecutivo la que fue debatida y discutida, sobre la base de que afectaba a largo plazo a la industria del salmón, con el telón de fondo de las movilizaciones en el sur y extremo sur del país.
El Gobierno explicó en reiteradas ocasiones que la propuesta no tenía efecto retroactivo y que solo entraría en efecto para concesiones futuras, pero los parlamentarios dijeron que al extinguirse esos derechos no había una política de relocalización de las faenas, de las que depende todo ese sector productivo.
Como recordó el senador Juan Ignacio Latorre, presidente de la Comisión Mixta, destaca un acuerdo en casi todas las materias, pero reconoce que no hubo consenso en definir plazos límite para la explotación económica al interior de espacios protegidos.
Un voto clave para no llegar a un acuerdo fue el del senador independiente, Matías Walker, quien calificó como ‘polémica’ la indicación del ejecutivo que, eventualmente, sacaría las salmoneras de las reservas naturales.
Walker dijo que influyó en el resultado final, que las organizaciones se opusieran y apuntó que la indicación se trabajó sin hablar con ellos.
Quienes respaldaron la lógica inicial del proyecto, no se explican cómo la iniciativa comenzó como una propuesta ecológica y terminó dominada por el debate productivo.
El diputado de Revolución Democrática, Jaime Sáez, recordó que el punto es preservar espacios naturales y fauna endémica y aún cree que es posible que eso sea compatible con el crecimiento económico.
Desde la oposición califican como un logro derribar la propuesta sustitutiva del gobierno, planteando que esto asegura puestos de trabajo para aquellos que temían perderlo.
Y aquí está el tema pendiente y central: El gobierno dividirá la Ley de Pesca, con una parte dedicada a un proyecto de acuicultura que deberá hacerse cargo del desarrollo productivo y científico.
El diputado UDI, Juan Antonio Coloma, planteó que esta será la forma en que se resolverá este conflicto.
El Servicio de Biodiversidad y de Áreas Protegidas será creado tal y como está el proyecto, esperando aún la ratificación de ambas salas del Congreso Nacional, que de aprobar la propuesta, lo harán sin zanjar el futuro de las concesiones extractivas en los parques nacionales.