El ahora exsubsecretario de Previsión Social, Cristián Larraín, declaró que “no hay un sumario” por el supuesto caso de acoso sexual que habría gatillado su renuncia.
Asimismo, Larraín también reconoció una relación tensa con la ministra del Trabajo y Previsión Social, Jeannette Jara.
Cabe recordar que Larraín había salido del Ministerio el viernes de la semana pasada de manera “sorpresiva”.
“Yo trabajo con la puerta abierta, así de transparente”, reconoció Larraín en conversación con Radio Bío Bío.
Asimismo, Larraín no descartó ir a la justicia si fuese necesario para “clarificar cualquier situación.
“No, sumario no se hizo. Me pidieron la renuncia así no más. No hubo sumario. En los sumarios las personas presentan cargos, descargos, explican. En fin”, señaló.
Su historia con la ministra Jara
“No puedo saber por qué me pidieron la renuncia. No estoy en la mente del Gobierno. Lo que sí me preocupa es que estemos en Chile en presencia de una cultura de la cancelación donde simplemente se desechan a las autoridades sin investigación previa. Eso lo encontraría extremadamente preocupante. Quiero creer que no estamos frente a eso”, añadió.
“Yo lo único que le puedo garantizar es que jamás he emitido comentario alguno, de ninguna naturaleza, dirigido hacia una persona en particular, ni hombre ni mujer”, confesó.
“Empecé a diseñar una reforma que sin renunciar a subir pensiones se pudiera hacer cargo de temas que hoy día son relevantes para la ciudadanía y que yo no soy quién para juzgar, como la propiedad de los fondos, la herabilidad y la libertad de elección”, explicó.
“Lo modelé. Lo modelé junto al equipo del Ministerio de Hacienda. Demostré que se podía subir pensiones, igual como están en la reforma, de forma sostenible. Y además no sólo hice eso, sino que me puse a socializarlo con parlamentarios de todo el espectro político, desde Republicanos hasta el Frente Amplio”, añadió.
“El 3 de mayo participé de un seminario y dije una obviedad: las cuentas nocionales no tienen mayoría parlamentaria, ni siquiera en la DC ni en el Partido de la Gente ni mucho menos en la derecha, y que como Gobierno, si queríamos llevarla adelante, estábamos obligados a buscar una alternativa”, señaló.
“Después de esto, la relación con la ministra se tensó. Muy poca comunicación”, confesó Larraín.
“El 9 de mayo me encuentro con la ministra en la cafetería del Congreso, habían 30 personas dando vueltas, y ella me reprende por haber emitido esas declaraciones, y me dice que me tenía que quedar callado”, relató.
“Después me llama un parlamentario de derecha, no voy a decir quién, y me dice ‘Cristián, hay rumores que dicen que tienes problemas con el Gobierno’. Inocentemente no le di mayor importancia“, concluyó.
El llamado de la ministra Jara
“A las 3 de la tarde (del viernes) participo en una reunión de trabajo con los equipos de Hacienda, Superintendencia de Pensiones y la Subsecretaría con la ministra (Jara) mostrando alternativas para la reforma”, relató.
“La ministra no dijo una sola palabra en la reunión. La reunión terminó y al rato me llama la ministra y me dice ‘subsecretario, tiene que renunciar porque me llegó una denuncia por acoso sexual en su contra"”, reveló Larraín.
“Mi respuesta fue: ‘Ministra, quién está haciendo esta acusación y cuál es el alcance de esta situación’. Entonces me dijo: ‘No se puede saber, esto es secreto"”, mencionó.
“Es una denuncia por uso de lenguaje de connotación sexual en público. Enfatizo en público porque ni siquiera la acusación era por uso de lenguaje de connotación sexual dirigido a una persona en particular. Eso es lo que sé”, finalizó.