¿Qué pasó con Elisa Loncón? La polémica entre la Universidad de Santiago de Chile (Usach) y el Consejo para la Transparencia, a raíz de la solicitud de El Mercurio para conocer los “antecedentes académicos” de Elisa Loncón, instaló en el lenguaje común una imprecisión sobre los “títulos” de la exconvencional.
No son los títulos. A Loncón no se le piden los títulos. De hecho, la propia Usach debió salir a rectificar dicha imprecisión.
Entonces, ¿qué le pide el Consejo para la Transparencia a la Usach por el caso de la expresidenta de la Convención Constitucional?
A raíz de la solicitud realizada por El Polígrafo de El Mercurio, en 7 puntos, BioBioChile explica el caso de Elisa Loncón. En específico, qué dice el Consejo para la Transparencia y a qué apelan la Usach y la propia Loncón.
1. El inicio de la polémica: ¿Qué pasó con Elisa Loncón?
El 4 de julio del año pasado, el entonces rector de la Usach, Juan Manuel Zolezzi, firmó el “permiso sabático remunerado” para la académica Elisa Loncón. Con dicho permiso, Loncón podría visitar universidades extranjeras y realizar publicaciones académicas en el plazo de un año.
Después de un tiempo, dicho permiso se hizo público y algunos usuarios en redes sociales criticaron a la exconvencional. Incluso, algunos parlamentarios de Chile Vamos presentaron un oficio en Contraloría para “aclarar la naturaleza de ese permiso”, es decir, iniciar un proceso administrativo para determinar la validez de dicho permiso.
Tras ello, la propia Loncón debió explicar qué realizaría durante ese tiempo. En simple: publicar libros y dar conferencias. Por las críticas en su contra, la académica acusó “odio racial” y “neo-apartheid”.
2. ¿Quiénes pueden acceder al “permiso sabático remunerado”?
Al tiempo, el entonces rector Zolezzi salió a defender la firma al permiso e indicó una serie de requisitos para acceder a dicho beneficio.
En palabras de Juan Manuel Zolezzi, para acceder a dicho permiso es necesario contar con “cierta jerarquía académica y antigüedad, un curriculum importante desde el punto de vista de las publicaciones”.
“El permiso otorgado a la Dra. Elisa Loncon Antileo se basa en su normativa vigente, que establece que los integrantes de su cuerpo académico regular, con jerarquía de profesor, tienen este derecho por cada seis años de servicio completos e ininterrumpidos”, dicen desde la Usach.
“Esta autorización considera un mecanismo de evaluación para el cumplimiento de los compromisos que contrae el beneficiario y le ha permitido a la Dra. Loncon publicar tres libros, además de participar en conferencias en universidades de Estados Unidos, viajes financiados por estas instituciones”, agregan.
Cada 6 años los académicos de la Usach pueden solicitar el permiso. “En el caso de Loncón, nunca lo había pedido”, explicó el entonces rector Zolezzi.
“Ella está en todo su derecho de pedir ese permiso. Además, es una académica muy distinguida, aunque no se la crean”, añadió en esa oportunidad.
3. ¿Cómo surgió la solicitud?
Haciendo uso de la Ley de Transparencia, desde el equipo de El Polígrafo de El Mercurio, solicitaron los “antecedentes académicos” de Elisa Loncón a fin de “justificar su año sabático”.
En una primera instancia, el diario pidió vía prensa los antecedentes académicos de Loncón, sin embargo, la Usach no se los entregó. A raíz de eso, optaron por realizar una solicitud de Transparencia.
Desde El Mercurio justificaron la petición a Transparencia argumentando que no es posible acceder a la información sobre sus clases a través de la página web de la Usach.
“No es posible corroborar si hizo clases en el período consultado ni la cantidad de horas dedicadas a esto”, detallaron.
“Los papers e investigaciones tampoco están actualizados en la página de la Usach datos que también fueron consultados vía prensa y no fueron entregados”, añadieron.
“Ante la falta de información por parte de una fuente oficial se optó por realizar la petición”, consignó el periódico.
Para contextualizar, desde abril de 2009, la Ley de Transparencia reconoce a todas las personas su Derecho de Acceso a la Información Pública. Por lo tanto, en el caso de la Usach, al ser una “institución estatal y pública”, debe rendir cuentas a la ciudadanía a través de la Ley de Transparencia.
4. ¿Qué se le pide a Elisa Loncón?
En simple, y para aclararlo desde ya, a Elisa Loncón no se le piden sus títulos ni grados académicos universitarios, sino más bien sus “antecedentes académicos”.
Dichos “antecedentes académicos” hacen referencia a, por ejemplo, cursos realizados, horas destinadas y estudios o papers publicados entre 2018 y 2022.
Incluso, la propia Usach debió salir a desmentir dicha imprecisión.
“Nunca se solicitaron ni los títulos ni grados académicos universitarios de la Dra. Loncon”, precisó la universidad estatal a través de un comunicado de prensa.
5. ¿A qué apela Loncón?
Elisa Loncón apeló a que dichos antecedentes ya son de público conocimiento.
“Toda mi documentación académica es una documentación validada por todas las universidades, incluyendo por la Contraloría General de la República”, detalló.
“No es cierto que oculte la información, mis papers, mis publicaciones, mi trabajo, mi trayectoria está en la página de la universidad, de Google Academic”, añadió.
Además, Loncón criticó a los parlamentarios de oposición por el oficio enviado a la Contraloría para “aclarar la naturaleza de ese permiso”.
“La derecha y sus mentiras. Así ganaron el plebiscito, con injurias y confundiendo a la ciudadanía”, dijo la académica.
“Tengo el derecho a utilizar un sabático y participar en seminarios internacionales. Soy académica universitaria, aunque le duela al racismo”, añadió.
6. ¿A qué apela la Usach?
Desde la Usach acusaron al Consejo para la Transparencia de incumplir con la legislación al obligarlos a enviar la información de Elisa Loncón.
En específico, aluden a los artículos 20 de la Ley de Transparencia, 18 de la Ley N°18.575 y 13 de la Ley N°19.880. En simple, el artículo 20 de la Ley de Transparencia establece la posibilidad de no cumplir con el envío de la información requerida si afecta los derechos de terceras personas.
“Cuando la solicitud de acceso se refiera a documentos o antecedentes que contengan información que pueda afectar los derechos de terceros, la autoridad o jefatura o jefe superior del órgano o servicio de la Administración del Estado, requerido, dentro del plazo de dos días hábiles, contado desde la recepción de la solicitud que cumpla con los requisitos, deberá comunicar mediante carta certificada, a la o las personas a que se refiere o afecta la información correspondiente, la facultad que les asiste para oponerse a la entrega de los documentos solicitados, adjuntando copia del requerimiento respectivo”, señala la Ley de Transparencia.
Mientras tanto, los otros dos artículos hacen referencia a la “falta de quorum” para haber decidido obligar a la Usach a enviar la información al Consejo para la Transparencia, y a temas de “bases de los procedimientos administrativos que rigen los actos de los órganos de la administración del Estado”.
Usach acusa “discriminación” hacia Elisa Loncón
También, desde la Usach acusaron “discriminación” hacia Elisa Loncón. “Se ha generado lamentablemente un cuestionamiento injusto y discriminatorio contra la Doctora Loncón”, indicaron.
Por lo anterior, la Universidad apeló a respetar el derecho de Loncón y no enviar la información requerida por el Consejo para la Transparencia.
En específico, la casa de estudios confirmó haber cumplido con su obligación de notificar a la persona involucrada, es decir, Elisa Loncón. Tras ello, “se recibió su oposición”, revelaron desde la Usach. Por lo tanto, y “en virtud de lo precedentemente señalado, no procede efectuar la entrega de información”, resolvieron.
“Como es sabido, la Universidad recibió un requerimiento presentado por Ley de Transparencia, en que se solicitaba entregar en detalle “las actividades académicas que ha desarrollado la señora Elisa Loncón durante los últimos 5 años (2018-2022) como académica de la Usach, indicando si ha realizado cursos de pregrado y posgrado, de cuántas horas, así como el detalle de la publicación de papers o estudios publicados por la Universidad en el marco de su actividad docente o de investigación”, informó la Usach.
En resumen, “la Universidad de Santiago no se niega a entregar ninguna información ni ha señalado nunca su intención de que la información sea secreta o reservada. Solamente, pide que se resuelva conforme a la ley”, mencionó el secretario general de la Usach, Francisco Zambrano.
Desde la Usach consideran que el Consejo para la Transparencia “decidió volver a solicitar la información a la académica, infringiendo artículos de leyes que establecen quorum y bases de los procedimientos administrativos que rigen los actos de los órganos de la administración del Estado”.
Ahora bien, respecto a la acusación de la Usach por una “falta de quorum” del Consejo, el mismo Estatuto de Funcionamiento de dicho organismo señala un mínimo de tres consejeros para sesionar.
“El Consejo Directivo requerirá para sesionar un quórum mínimo de 3 consejeros y adoptará sus decisiones por la mayoría. El Presidente del Consejo Directivo tendrá voto dirimente en caso de empate”, dice el artículo 9o “Sesiones y quórum”.
“El Consejo Directivo sesionará ordinariamente una vez a la semana, a lo menos, en los días y horas establecidos previamente por el Consejo Directivo”, señala.
7. ¿Qué respondió el Consejo para la Transparencia?
Desde el Consejo para la Transparencia evitaron referirse en profundidad a la polémica con la Usach y la académica Elisa Loncón.
No obstante, y pese a haber sido breves, fueron claros en indicar que “el tema de fondo no es un tema procesal”.
“Aca el tema de fondo no es un tema procesal, es saber si la Usach va a entregar o no una información que por ley es pública, y que ellos mismos nunca han negado que sea información pública”, señaló el presidente del organismo, Francisco Javier Leturia.
Además, adelantaron que no van a “polemizar por la prensa” pues para eso está la Corte. “Los descargos los vamos a hacer ante la Corte”, reconoció Leturia.
“Somos un órgano garante de derechos y nuestra obligación es cumplir la ley y hacer cumplir la ley”, concluyó.