El expresidente, convencional y diputado, Fuad Chahín, confirmó este viernes su renuncia a la Democracia Cristiana (DC), realizando duras críticas a la directiva del partido y al ambiente dentro de la colectividad.
“Ya no soy militante del partido. Renuncié el 1 de diciembre, el día de mi cumpleaños. Era el momento de iniciar un nuevo ciclo personal y político con la vuelta al sol que representa el cumpleaños”, dijo Chahín.
En entrevista con diario La Tercera, Chahín comentó que el 1 de diciembre renunció a la DC, afirmando que es “insoportable militar” en el partido y que sus actuales dirigentes sólo quieren volver a trabajar al Estado.
“No voy a hablar mal del partido, pero creo que cuando se terminan normalizando las injusticias, el abuso, la persecución, en lugar de tomar medidas para remediarlo, creo que eso hace que exista una descomposición ética dentro del partido que hace que esto sea insalvable”, comentó el exdiputado.
“No solo hay un error en la línea política, sino que hay una parte de su dirigencia nacional e intermedia que lo único que quiere es que el partido vuelva al Estado, para ocupar espacios dentro de la administración del Estado y que harían cualquier cosa, destruir a cualquier persona, pasar por encima de las normas de convivencia interna para lograr ese objetivo. El partido es un lugar insoportable para militar”, añadió.
Chahín ya había sido suspendido de la militancia por parte del Tribunal Supremo hace algunas semanas, por lo que ahora confirmó se renuncia al partido y agregó que Undurraga ha profundizado el quiebre al interior de la DC.
“Este partido venía hace rato en crisis. Lo que pasa es que algunos teníamos la expectativa de que Alberto (Undurraga) hiciera algo distinto, pero en lugar de corregir y rectificar, ha profundizado una actitud que nos ha llevado a este quiebre”, sostuvo.
Chahín ocupó diversos cargos durante los gobiernos de la Concertación, y fue diputado entre 2010 a 2018 por la región de La Araucanía. En 2018 fue elegido presidente de la DC y en 2020 el único militante el partido en ser electo convencional constituyente, renunciando semanas después debido a las presiones por los malos resultados electorales.