Cerca de mil 500 funcionarios del Servicio Nacional del Patrimonio Cultural a lo largo del país, incluyendo Rapa Nui, se encuentran movilizados desde el pasado lunes 7 de noviembre.
Este hecho mantiene a los museos cerrados, en algunos casos, o con turnos éticos para la atención de visitantes.
Los trabajadores decidieron paralizar sus funciones por -según consideran- un incumplimiento del acuerdo firmado el 6 de junio por la ministra de las Culturas, Julieta Brodsky; la subsecretaria del Patrimonio, Paulina Soto; además de representantes de la Asociación Nacional de Funcionarios del Patrimonio (Anfupatrimoinio) y trabajadores del Servicio (Anatrap).
“Presupuesto desequilibrado”
Bernardo Jorquera, secretario general de Anfupatrimonio, comentó a La Radio los puntos esenciales que no se estarían cumpliendo y que derivaron en el paro.
“Lo más importante es la nivelación de los últimos grados de auxiliares y administrativos. Eso se tenía que hacer este año y no se ha hecho. Pero también el presupuesto, que es bastante desequilibrado en relación al ítem de personal, no está financiando lo que está comprometido para el presupuesto del año 2023”, dijo el dirigente.
En esa línea aseguró que “no hay claridad y no hay compromiso de la autoridad para generar las acciones y condiciones participativas que permitan superar este problema“.
Los funcionarios movilizados esperan que el Ministerio de las Culturas les permita participar en las comisiones mixtas de Presupuesto en el Congreso y que exista también diálogo con el Ejecutivo.
Este viernes la Ministra de las Culturas y la Subsecretaria del Patrimonio, Carolina Pérez, se reunirán con la Dirección de Presupuesto del Ministerio de Hacienda, con el fin de solicitar un aumento de presupuesto en materia de personal.
A esta reunión no fueron invitados los dirigentes de Anfupatrimonio y Anatrap.
La Radio intentó obtener una declaración de la Ministra de las Culturas, sin embargo, desde Comunicaciones declinaron referirse al tema.