El nuevo presidente de la Cámara de Diputados, Vlado Mirosevic, pidió evitar “actitudes matonescas” durante su primer discurso tras asumir la testera, tras ser increpado por René Alinco.
Se trató de su primera intervención oficial ante la Cámara, luego de ser elegido como presidente en una controvertida elección.
Al inicio de su presentación, Mirosevic adelantó que “este presidente escuchará a todos los sectores políticos que componen esta Cámara”.
“Dirigir esta Cámara no será fácil y todos lo sabemos, en el estado en que está la política en Chile y en el mundo, está muy viva la tentación de gritar antes que escuchar y de patear la puerta, antes de dialogar”, señaló.
“Hoy mismo ofrezco espacios de conversación y pido también a la oposición tener una actitud constructiva. Pongámonos de acuerdo de manera inmediata en los treinta proyectos de ley, que de izquierda a derecha necesitamos desempolvar de este Congreso y aprobar”, señaló.
Por otro lado, reconoció el gesto del Partido Comunista (PC), que bajó la candidatura a la Mesa de la diputada Karol Cariola, tras no conseguir asegurar los votos.
“No es justo que algunos por sus ideas no puedan estar acá, porque en eso consiste la democracia”, sentenció.
Asimismo, apuntó a los “populistas y autoritarios”, pidiendo “aislarlos”, lo que causó la molestia del diputado René Alinco, quien incluso lo interrumpió a viva voz desde su puesto.
“A los populistas y los autoritarios les quiero decir que en este presidente tendrán un claro adversario, porque la democracia hay que cuidarla”, sentenció Mirosevic.
Mirosevic fue increpado por Alinco: “Háblele a todos presidente”
Según parlamentarios que estaban cerca de Alinco, el diputado por Aysén empezó a recriminarle asegurando que su discurso no era de unidad, sobre todo cuando agradeció a quienes habían votado por él.
En medio de los gritos, Mirosevic intentó poner orden pidiendo respeto en más de una ocasión, asegurando que “le estoy hablando a aquellos que honraron su palabra”.
“Háblele a todos presidente”, habría gritado Alinco, por lo que otros de sus colegas empezaron a tratarlo de “vendido”, a lo que respondió “vendido pero no traidor”.
“Estas actitudes matonescas son lo que tenemos que erradicar de esta Cámara, esto es lo que tenemos que cambiar”, sentenció el diputado liberal, entre aplausos.
Tras el discurso, algunos parlamentarios cuestionaron el hálito alcohólico con el cual llegó el diputado Alinco, quien ha sido duramente criticado por su “pactos” con colegas de oposición.
Alinco justificó su polémica interrupción “cuando se falta la verdad”
Tras la sesión, el diputado Alinco se justificó de lo sucedido en la Sala, apuntando sus críticas a la intervención del Gobierno en la elección de Mirosevic.
“La Cámara de Diputados tiene que ser autónoma, y lamentablemente con la decisión que se tomó ayer a través de votos de dudosa influencia, me atrevo a decir que hoy día la Cámara va a ser un tambor de resonancia del Ejecutivo, concretamente del presidente Boric”, criticó.
“Yo al menos no estoy de acuerdo, ni con este Gobierno, ni los que vengan a futuro”, agregó.
Consultado por la interrupción, Alinco la defendió asegurando que “cuando se falta la verdad, hay que interrumpir”, reconociendo que le gritó “entre otras cosas, que diga la verdad”.
“En La Moneda chasqueaban los dedos y Raúl Soto salía corriendo, y mi temor es que con Vlado va a pasar lo mismo, y eso no puede ser”, sentenció.
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