Carabineros dio a conocer la noche de este viernes la primera aspirante trans de la institución, se trata de Isabella Panes Proboste, quien actualmente es alumna de la Escuela de Formación.
Isabella contó en una entrevista con LUN, que es oriunda de Laja, región del Bío Bío, donde vivió episodios de discriminación durante su infancia-juventud, pero que siempre supo que era mujer y que quería integrar Carabineros.
“Laja es un lugar muy conservador, así que en mi infancia lo pasé súper mal. Por la forma en que los padres educan a los niños (…) Mis papás y hermanas siempre me protegieron, pero lo pasaba mal igual. Mi mamá tenía que ir a dejarme al colegio todos los días porque yo llegaba llorando. No quería ir, no quería entrar. Me hacían disertar y mis compañeros se reían de mi voz”, sostuvo.
Panes cuenta que a los 14 años empezó el proceso de transición, cuando después de una larga búsqueda consiguió la autorización médica para iniciar el consumo de hormonas, y que recién a los 18 se sometió a la primera cirugía.
“A los 18 años recién pude hacerme la primera cirugía. En Chile estaba prohibido que una mujer transexual se hiciera una intervención quirúrgica y para todo había que pedir permiso y tener un certificado psiquiátrico. Eran los tiempos en que esto se conocía con el nombre de trastorno de identidad de género”, indicó la aspirante a policía.
Sobre su llegada a Carabineros, cuenta que en 2015 postuló por primera vez, aunque aún no realizaba el cambio de género, por lo que no quedó. En 2016 postuló ya como Isabella y tampoco fue aceptada. Pero en 2021 volvió a postular y fue aceptada, siendo la primera aspirante trans.
“La primera vez que postulé a Carabineros fue el 2015, pero aún no me salía el cambio de nombre. No quedé. Al año siguiente postulé de nuevo con mi nombre actual, Isabella, y con la apariencia que tengo, pero tampoco quedé. Mis papás estaban bien asustados con todo esto. Porque pensaban que Carabineros era una institución súper machista y que me podían hacer algo, que lo iba a pasar mal por mi condición”, explica.
Por último, descarta que haya vivido algún tiempo de discriminación en estos meses por ser trans, pero lamenta que debido a que entró con una edad relativamente avanzada, deberá centrarse en trabajados administrativos y no en orden y seguridad.
“No me he sentido discriminada por nada y mis compañeras me tratan como una mujer más. Eso sí, no voy a trabajar en orden y seguridad como me hubiese gustado, porque postulé muy tarde, así que voy a cumplir labores administrativas”, sostiene.