Tras aprobarse este martes el proyecto de Matrimonio Igualitario en la Cámara de Diputados y Diputadas, despachándolo al Senado para su tercer trámite constitucional, el candidato republicano, José Antonio Kast, dijo que “aunque a mí no me guste la ley, sigue siendo ley de la República”.
La iniciativa, que ingresó al Congreso en 2017 en el marco del cumplimiento de un Acuerdo de Solución Amistosa (ASA) que el Estado de Chile y el Movilh firmaron ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, fue visado por 101 votos a favor, 30 en contra y 2 abstenciones.
En esta línea, el presidenciable del Frente Social Cristiano, indicó que “he señalado con mucha convicción que yo soy partidario del matrimonio entre un hombre y una mujer, pero que soy un hombre demócrata, que respeta la decisión de las mayorías”.
Libertad de conciencia
Asimismo, explicó que “si el Parlamento se pronuncia a favor del Matrimonio Igualitario, bueno va a ser ley al igual que lamentablemente la ley de aborto se aprobó”.
Junto a esto, indicó que no ha hecho ninguna actividad en contra de las personas que han practicado abortos. “Lo que que yo defiendo es la libertad de conciencia, que cuando un médico trabaja en el sector público no puede ser obligado a practicar un aborto, porque él tiene la libertad de conciencia de rechazarlo”.
Finalmente, reiteró que es una persona que valora y respeta la democracia señalando que “cuando una mayoría toma un acuerdo y ese acuerdo termina en una ley, aunque a mí no me guste la ley, sigue siendo ley de la República. Mientras nosotros no tengamos una mayoría parlamentaria, que no tenemos, no se va a ver el tema”, concluyó.