Tensiones causó en el oficialismo la candidatura senatorial por el PRI del exalcalde de Coquimbo, Pedro Velásquez, condenado por hechos de corrupción con prohibición de por vida para ejercer el cargo de jefe comunal. A pesar de ello, la sanción no le impidió ocupar el puesto de diputado durante los últimos 8 años.
Desde el comando de Sebastián Sichel, aseguraron que dicha candidatura no los representa y que son los partidos políticos que componen la coalición los que deberán “hacerse responsables”.
Según fuentes de Radio Bío Bío, fue una candidatura que se decidió a “última hora” por los desacuerdos que causaba, pero que finalmente decidieron levantarla, ya que vieron en él una oportunidad de “convocar personas”.
Ante una serie de cuestionamientos, el presidente del PRI, Rodrigo Caramori, aseguró que se trata de una postulación que contó con la aprobación y el acuerdo de los cuatro partidos de la coalición.
El coordinador de campaña de Sebastián Sichel, Pedro Browne, afirmó que habrá que preguntarle a los partidos por qué tomaron esta decisión y que aquella candidatura no los representa.
Otra de las candidaturas que se discutió hasta última hora fue la del exministro de Salud, Jaime Mañalich, quien postulará al Senado por la región Metropolitana. En esa línea, aseguró que no teme a nuevas críticas.
En tanto, fuentes del oficialismo aseguraron que en el Comité Electoral de Chile Podemos Más —ex Chile Vamos— estaba presente el representante del comando de Sichel, Rodrigo Ubilla, quien no se habría opuesto a la candidatura de Velásquez.
Además, que lo del exalcalde de Coquimbo se habría producido por “las divisiones de Renovación Nacional y la falta de un buen acompañante para un candidato de la UDI en Coquimbo”.