El miércoles 11 de diciembre de 2019, la Sala del Senado aprobó con 23 votos a favor, 18 en contra y ninguna abstención la acusación constitucional en contra del exministro del Interior, Andrés Chadwick.
Así, el Parlamento finalmente acusó de manera satisfactoria al gremialista de haber infringido gravemente la Constitución y las leyes, haber dejado estas sin ejecución al omitir la adopción de medidas para detener violaciones sistemáticas a los Derechos Humanos y haber afectado derechos constitucionales no contemplados en los Estados de Emergencia, todo en medio del estallido social que comenzó el viernes 18 de octubre.
Con la resolución, el “coronel”, de entonces 63 años, quedó con la prohibición de ejercer cargos públicos – de confianza o por elección popular – por un periodo de cinco años.
Vida nueva
Tras el golpe, Chadwick se retiró de la vida pública. Al menos en lo que la ciudadanía puede ver.
Según diario El Mercurio, el exministro actualmente divide su tiempo entre clases de derecho constitucional en la Universidad San Sebastián, en pregrado y un diplomado, y el estudio que comparte con el abogado penalista Luis Hermosilla.
Sumado a ello es parte, desde 2020, del Centro de Arbitraje y Mediación de la Cámara de Comercio de Santiago y tiene intenciones de tomar clases de historia.
Pero de política poco, al menos mucho menos si se compara con su tiempo activo como figura en los pasillos del poder.
“A Andrés le cortaron los brazos. No es lo mismo que te acusen constitucionalmente a los 40, como a Yasna Provoste, que a los 65″, dijeron al citado medio desde su entorno.
“Chadwick se privatizó”, comentó otra fuente, confirmando que ya no es parte de la vida de la UDI en eventos del partido, apariciones públicas y muchos menos concediendo entrevistas.
“Los amigos son como las estrellas”
La acusación también tuvo efectos en sus amistades políticas.
Según su círculo, Chadwick ya no habla con los senadores José Miguel Insulza (PS), Juan Pablo Letelier (PS), Francisco Huenchumilla (DC) ni Ricardo Lagos Weber (PPD). Todos votaron a favor en la acusación.
En ese grupo también habría que considerar al exsenador Felipe Harboe (PPD), quien dejó su escaño y se postuló con éxito a la Convención Constitucional.
Pero como los amigos son estrellas que no los ves de día, sino que cuando está oscuro, como dice el dicho, los aliados de siempre siguen a su lado.
Entre ellos destacan su primo, el presidente Sebastián Piñera. Según El Mercurio se ven a menudo y ambos vieron algunos partidos de la Copa América juntos.
Al Mandatario se suman el mandamás del segundo piso, Cristián Larroulet, Marcela Cubillos, Juan Antonio Coloma padre y Javier Macaya (presidente de la UDI).
Dentro de sus redes estarían el diputado Diego Schalper, el exsubsecretario Rodrigo Ubilla y Sebastián Sichel, a quien muchos afirman que él “descubrió”.
Todo se remonta a la creación, en 2015, de un instituto de políticas públicas en la USS. Con el tiempo, Sichel dio el salto a Corfo tras la designación de Piñera.
Hoy en día, Chadwick aparece en varias querellas derivadas del estallido social, pero quienes lo conocen indicaron a El Mercurio que está “tranquilo”.
“Se levanta y se acuesta como abogado”, dicen. “Chile cambió y los viejos deben jubilarse”, les diría él.