El senador Carlos Bianchi buscará inhabilitar a la ministra del Tribunal Constitucional, María Luis Brahm, para que no vote por el requerimiento para bloquear el proyecto de tercer retiro de los fondos de pensiones.
Este requerimiento se ingresará de aquí al viernes ante el TC, donde se argumenta que Brahm no actuaría con imparcialidad en este caso, por sus comentarios previos respecto al rol del Tribunal Constitucional y la “opinión” que habría dado en el fallo sobre el segundo retiro.
En diciembre pasado, gracias al voto de Brahm, el Tribunal Constitucional declaró inconstitucional el proyecto de segundo retiro del 10% de los fondos previsionales, presentado por diputados, debido a que consideró que era potestad exclusiva del presidente de la República.
En dicha ocasión, hubo un empate de votos, donde cinco ministros manifestaron su intención de acoger, mientras que otros cinco estaban por rechazar, pero Brahm -como presidenta del TC- dio su voto de mayoría.
En el requerimiento presentado, se indica que la ministra Brahm dio una “opinión” con difusión al momento de dar el voto dirimente durante el anterior fallo del TC, por lo que sería uno de los argumentos para inhabilitarla.
“Emitió tanto una “opinión” con publicidad, como un “dictamen”, en términos que ninguno de los otros señores Ministros que integraron el pleno correspondiente lo hizo, por lo que en todo caso insoslayablemente entendemos que respecto de la Señora Ministra y presidente de este Excelentísimo Tribunal Constitucional, señora María Luisa Brahm, se configura el motivo de implicancia promovido y que así debe resolverlo el pleno de este Excelentísimo Tribunal Constitucional con exclusión de ella“, dice el requerimiento.
Brahm ha sido cuestionada también por haber sido asesora del segundo piso de La Moneda en el primer gobierno de Sebastián Piñera, algo que desde la oposición han reprochado constantemente.
Además, en una entrevista, Brahm defendió que el TC fuese una “tercera cámara” en declaraciones a diario La Tercera. Algo que el requerimiento también menciona.
“Sí somos una tercera cámara y está dentro de las atribuciones que la Constitución entrega al TC, que es el control de las leyes, y eso se produce en dos momentos antes de que sean leyes, o sea, durante la tramitación o aprobadas con control preventivo, o de manera posterior a través de las inaplicabilidades”, comentó.