María Inés Facuse, la exesposa del presidente de la ANFP, Sergio Jadue, y que hoy reside en Estados Unidos, interpuso un recurso de protección en contra del cineasta Pablo Larraín, creador de la serie de TV “El Presidente”. La producción cuenta el rol y participación que tuvo en el escándalo de coimas en la FIFA.
Al mismo tiempo la mujer recurrió en contra de la plataforma de streaming Amazon Prime Video donde se transmitió la película en junio de 2020.
Patrocinada por su abogado Christian Berndt, acusó que Larraín nunca le solicitó autorización para utilizar su nombre real e imagen.
“En dicha representación cinematográfica, se utiliza el nombre e imagen de doña María Inés Facuse sin su autorización, retratándola en situaciones alejadas de la realidad”, se lee en la presentación.
Y sigue: “Desde el estreno de la serie, doña María Inés se ha visto abrumada por una fuerte presión psicológica, la cual la aqueja día a día y no le permite continuar con su vida con normalidad (…) el impacto que ha tenido en su salud mental es de enorme envergadura”.
Facuse relata que, a su juicio, quienes vieron “El Presidente” ha permitido que sea juzgada públicamente, como una persona que tuvo un rol detrás de la corrupción en el “FIFA Gate”.
“Gran número de personas”, señala, han dado por sentado que los hechos relatados son una explicación fehaciente de lo sucedido, lo que ha causado que sea juzgada públicamente como una persona con un grado de responsabilidad dentro del caso conocido como “FIFA Gate”.
“Sus hijos, ambos menores de edad al momento de los hechos representados en la serie, tienen acceso a la misma, por lo que la perturbación a su integridad psíquica se incrementa. Su hija menor, que por su edad tiene pocos recuerdos precisos de la época, llena sus vacíos de la historia con aquello que escucha y se retrata en la televisión, siendo “El Presidente” la representación más completa”, detalla el libelo.
Agrega que el film también normaliza la violencia de género, porque en una de las escenas “su cónyuge la agrede, para luego disculparse regalándole un collar, el cual María Inés acepta y hace como si nada hubiese sucedido”.
El libelo aún espera que pase a la Primera Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago para su admisibilidad.