Un 14,7% aumentaron los casos y denuncias por homofobia y transfobia en Chile en 2020. Según señalaron desde el Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), el año fue “calificado como el de la ‘Resiliencia LGBTIQ+’ frente a los abusos, los compromisos incumplidos por parte de las autoridades, la carencia de condena pública estatal frente a los delitos de odio y la ausencia de una política focalizada para paliar los efectos del covid-19”.
En ese sentido, desde el Movilh dieron a conocer el XIX Informe Anual de Derechos Humanos de la Diversidad Sexual y de Género, elaborado por la ONG.
Según señalan, fue de resiliencia “porque en uno de los escenarios y contextos más adversos para su calidad de vida, la población lésbica, gay, bisexual, trans, intersex y queer (LGBTIQ+) gestionó sus propios recursos y capacidades para ir en ayuda de los más vulnerables, reaccionar frente a las injusticias y mantener en alto la lucha por la plena igualdad social y legal”.
La investigación
En tal sentido la investigación, de 450 páginas, fue lanzada este miércoles en el Parque San Borja por el vocero del Movilh, Óscar Rementería, junto a Benjamín Ascencio, joven que tras una ardua lucha consiguió que las isapres dejaran de considerar a la transexualidad como una enfermedad; a Alexandra Orrego Da Silva; cuya denuncia obligó al sistema privado de salud a brindar cobertura a las cirugías de cambio corporal de las personas trans; y a Carolina Órdenes y Octavio Albornoz, una pareja heterosexual, ambos docentes, quienes lograron que la Escuela San Lázaro de la Salle fuera sancionada por el bullying homofóbico que sufrió su hijo, un niño de sexto básico.
El informe destaca que 2020 también se caracterizó por un efectivo aumento de la discriminación; y no solo de las denuncias; por contradicciones en las Fuerzas Armadas de Orden y de Seguridad en torno a los derechos LGBTIQ+; por la consolidación jurídica de los derechos trans; por graves retrocesos en el Poder Judicial, que pese a expresarse al unísono que históricos avances volvieron a poner a la Corte Suprema en el Ranking Anual de la Homofobia y Transfobia, lo cual no ocurría desde el 2014.
Del mismo modo, también se caracterizó por la primera aparición en el mencionado listado de la discriminación de un/a presidente/a de la República; por la aprobación de dos nuevas leyes que protegen a las personas LGBTIQ+, pero en medio de más retrocesos e incumplimientos legislativos que avances; por el quebrantamiento estatal frente a su primer Acuerdo Internacional pro Derechos LGBTIQ+; por escasos progresos en el plano gubernamental; por la activa autogestión de los movimientos LGBTIQ+ para hacer frente al covid-19, por la indiferencia estatal frente a abusos sufridos por activistas LGBTIQ+ y por una transformación sociocultural favorable a la plena igualdad legal y social que es irreversible e imparable, dejando al Estado de Chile muy atrás de lo que reclama y necesita la ciudadanía, todos aspectos analizados detalladamente en el informe.
Discriminación
Según detalla el estudio, los atropellos subieron un 14,7% en 2020, sumando 1.266, la cifra más alta conocida hasta ahora y que concentra el 22,9% del total de abusos ocurridos en 19 años.
Las vulneraciones de derechos se dividen en 6 asesinatos; 132 agresiones físicas o verbales perpetradas por civiles; 16 abusos policiales; 110 casos de discriminación laboral y 33 de tipo educacional; 60 movilizaciones o campañas de odio; 379 episodios de marginación institucional; 64 exclusiones en el espacio público o privado; 253 casos de homo/transfobia comunitaria (“familia, amigos/as, vecinos/as”); 209 discursos que incitan a la violencia y 4 hechos de discriminación en la cultura, medios o espectáculos
Entre las categorías de discriminación que más abusos hubo y que resultan más preocupantes se encuentran las “declaraciones homo/transfóbicas” que aumentaron un 208%, seguidas por la “marginación en los espacios públicos o privados” (+106,4%), las “movilizaciones homo/transfóbicas” (+93,5%), las “agresiones físicas o verbales perpetradas por civiles” (+80,8%), “la discriminación comunitaria” (familia, vecinos) (+51,4%), la discriminación laboral (+50%) y los asesinatos (+20%).
Del total de abusos conocidos en 2020, el 26% afectó a gays; el 15% a lesbianas; y el 11% a trans (76 mujeres y 59 hombres), mientras el 48% perjudicó a la población LGBTIQ+ como conjunto.
En comparación al año precedente, la discriminación a gays aumentó un 78,4%; a trans un 46,8% y a lesbianas un 8,28%, mientras que los abusos contra la población LGBTI+ como conjunto mermaron un 6,26%. En tanto, y al considerar el total de 5.506 denuncias o abusos conocidos entre los años 2002 y el 2020, el 49,5% afectó a la población LGBTIQ+ como conjunto, el 20,3% a gays, el 15,9% a trans y el 14,3% a lesbianas
En cuanto a la distribución geográfica, la mayor concentración y número de casos en 2020 nuevamente se registró en Valparaíso con el 38,4% del total nacional, seguida por la región Metropolitana (23,93%), Bío Bío (3%), Coquimbo (1,65%), Maule (1,5%), Antofagasta (1,42%), Araucanía (1,42%), Los Lagos (1,26%) O´Higgins (1,02%), Atacama (0,63%), Ñuble (0.63%), Los Ríos (0.63%), Tarapacá (0,39%), Aysén (0,23%), Magallanes (0,71%) y Arica (0.07%). En tanto, las redes sociales, y en menor medida los medios de comunicación, acumularon el 26,21% del total de casos a nivel nacional.
La Región de Los Lagos aumentó un 33,3% los casos o denuncias por discriminación, seguida por la Metropolitana (32,3%), Maule (26,6%) Tarapacá (25%), Bío Bío (22,5%), Araucanía (20%), O´Higgins (18,1%), Coquimbo (16,6%), Atacama (14,2%), y Antofagasta (12,5%). En tanto en redes sociales hubo un incremento del 301,1%.
Por su lado, en Arica mermaron un 90% las denuncias por homofobia o transfobia, seguida de Aysén (-40%), Valparaíso (-28,7%) y Los Ríos (20%).
Finalmente Magallanes y Ñuble mantuvieron el número de casos del año precedente.
“Al 2020 puede concluirse que el incremento ya no solo se relaciona con que las víctimas denuncian más que en el pasado y están más empoderadas en sus derechos, sino también porque hay un aumento de la discriminación, en particular cuando se registran avances pro-derechos LBTIQ+ contra los cuales los opositores a la igualdad se movilizan con fuerza, violencia y sistematicidad”, apunta el informe.