El director de la Policía de Investigaciones, Héctor Espinosa, destacó la labor de los funcionarios durante el año, al realizar tareas que son ajenas a sus competencias por la “notable ausencia policial en las calles”.
En un saludo dirigidos a detectives, Espinosa reconoció que este ha sido uno de los años más difíciles del país, tanto por la pandemia como por las alteraciones al orden público.
Sin embargo, destacó que “la PDI ha salido airosa de estas duras pruebas, pues está formada por chilenas y chilenos de primer nivel, que no han trepidado en hacer frente a la adversidad y dar lo mejor de sí en favor de sus compatriotas”.
En esa misma línea, detalló que este año se llegó a un nivel histórico de incautación con más de 24 toneladas de droga de las tres principales: clorhidrato de cocaína, cocaína base y marihuana en sus distintas formas.
Lo anterior, por un valor superior a los 230 mil millones de pesos, a lo que hay que sumar 134 mil plantas de marihuana y más de un millón de dosis de drogas de síntesis.
También precisan que “decomisamos 1.132 armas de fuego y aplicamos control migratorio a más de 7 millones de personas, materializando además más de 1.500 expulsiones de personas extranjeras, ya sea por orden judicial o administrativa”.
Por esos resultados, recalcó que “no es casualidad que nuestros compatriotas evalúen a esta Policía Civil tal como lo hacen, pues los índices de confianza que se evidencian en todos los sondeos de opinión, son una muestra concreta del excelente trabajo que ustedes efectúan día a día en favor de nuestros compatriotas, lo que incluso nos ha obligado, ante la notable ausencia policial en la calle, a efectuar tareas de orden público que no nos son propias”.
El director llamó a los detectives a renovar la vocación de servicio público, su compromiso con la verdad y apoyo a las víctimas, porque “la gente de buena voluntad y de trabajo que habita en nuestro país, debe saber que nada, ni nadie nos amedrentará y que al iniciarse el año 2021, podrá seguir confiando en su PDI”.
Asimismo reiteró su compromiso de mejorar las condiciones laborales de sus subalternos. “Sigamos trabajando por una sociedad más justa y solidaria, no descansemos nunca en este incesante camino por llegar a la verdad. Continuemos haciendo nuestro trabajo profesionalmente con absoluto respeto a la dignidad y derechos de las personas, solo así seguiremos recibiendo el reconocimiento ciudadano”.
Para cerrar, insistió que “una policía altamente legitimada socialmente, como nosotros, es garante de la democracia y es la policía que Chile se merece”.