Ante la Comisión de Constitución del Senado, el ministro de Justicia, Hernán Larraín, respaldó la nominación de La Moneda del actual ministro de la Corte de Apelaciones de Santiago, Mario Carroza, como aspirante a la Corte Suprema.
Esto, después de que el presidente de la República, Sebastián Piñera, escogiera su nombre de la quina de jueces que aspiraban llegar al Poder Judicial. Principalmente, insistiendo en su compromiso con la justicia y la debida aplicación de la ley.
El ministro Larraín destacó la trayectoria del juez quien partió su carrera en el Poder Judicial en 1977 y que ha fallado en causas de violaciones a los Derechos Humanos perpetradas durante la dictadura cívico-militar de Augusto Pinochet.
De hecho, el secretario de Estado en la instancia le habló a la oposición, recalcando fallos donde Carroza condenó a ex agentes del Estado por crímenes de exmiristas como Miguel Enríquez, y también, los asesinatos de la Caravana de la Muerte en La Serena.
Asimismo, también habló al oficialismo, puntualmente a la UDI, ya que destacó la resolución del magistrado en la que condenó a Mauricio Hernández Norambuena a dos penas de 15 años por el homicidio terrorista del exsenador gremialista, Jaime Guzmán.
“(..) un apego al Derecho nacional y al Derecho internacional de los Derechos Humanos en forma clara, dándole a sus fallos una labor de seriedad y de ecuanimidad que es muy importante”, destacó Larraín, asegurando que Carroza era “un gran candidato para integrar la Corte Suprema”.
El senador Independiente, Pedro Araya, miembro de la Comisión de Constitución de la Cámara Alta, valoró la exposición del ministro Larraín, pero enfatizó que su voto lo decidirá mañana tras escuchar al juez en la misma instancia.
“Sin duda que al ministro Carroza lo precede una trayectoria bastante importante en temas de Derechos Humanos, obviamente una situación que consideraremos al momento de emitir opinión”, sostuvo el senador Araya.
Se espera que mañana Mario Carroza exponga ante la Comisión de Constitución del Senado. Posteriormente, en los próximos días, pasa a Sala, donde necesitará 2/3 de los votos de los congresistas para ser ratificado en la cúspide del Poder Judicial.