La exjefa de Enfermedades No Transmisibles del Ministerio de Salud (Minsal), Andrea Albagli Iruretagoyen, entregó el pasado 30 de septiembre su declaración a Fiscalía, en el marco de la querella por presunta diseminación imprudente de gérmenes patógenos en medio de la pandemia.
Albagli aseguró a Fiscalía que hubo un manejo irregular de los datos de la pandemia y afirma a los funcionarios les pidieron “manipular los datos”, consigna diario La Tercera.
“Recuerdo con mucha claridad un día que nos piden que cambiemos la información (…) El 24 de abril, porque previamente el valor absoluto reportado desde Epidemiología era siempre inferior a lo reportado por el ministro, ese día pasó que la información que estaba en Epivigila sobrepasó lo informado por Mañalich. Así que cuando ya había recibido la base de datos, mi jefatura directa, Rodrigo Fuentes, me indica que por pedido del ministro hay que borrar los últimos registros para hacerlo calzar, porque si bien podía haber diferencias, la información de Epivigila no podía exceder lo informado por el ministro. Nosotros no lo hicimos”, indica la profesional según detalla el citado medio.
De acuerdo al testimonio de Albagli, la solicitud de manipular los datos la hizo su jefatura directa, que cambió a mediados de abril, pero sostiene que la petición se hizo a “nombre del Gabinete” del Minsal.
“Ese día el Gap (diferencial) eran 30 casos, era pequeño. Eran 30 casos de contagio no más. Me piden del gabinete del ministro que vuelva a hacerlo para que se ajuste, entre comillas, el valor sin superar a lo informado por el ministro”, explica.
“Para mí fue muy evidente que eso era impropio, que no lo podíamos hacer. Esta indicación la recibimos a las 11:30 o a las 12:00. El informe (epidemiológoco) lo teníamos listo y lo estábamos terminando, antes de su publicación en la tarde, ahí fue cuando nos pidieron que modificáramos el informe y la base de datos a lo que el ministro había dicho. Fue verbal pero hay más testigos. Estaban todos los de la oficina, Pía Álvarez, Silvina Alvarado, Patricia Cerda, Rocío Martínez, Fabio Paredes, Mario Soto. Todos compartíamos el mismo espacio, excepto dos que estaban ahí circunstancialmente. Estábamos en dependencias del Ministerio”, agrega.
“Con la base de datos me refiero a lo que se extrae de Epivigila, lo que se descarga. Lo que ocurrió fue que rechacé la solicitud, porque manipular la base de datos es una irregularidad. Se mantuvo la orden del ministro, que no era admisible, por lo que se pidió que cambiaran el punto de corte de la base, que si era descargada a las 22:00, por ejemplo, se descargaba antes, no recuerdo bien pero el corte se corrió para las 18:00. Adelantaron el punto de corte hasta que hubiera un valor igual o inferior a lo informado por el ministro”, puntualiza sobre lo ocurrido.
La declaración de Albagli a Fiscalía es un documento de 21 carillas donde explica esta situación. La funcionaria renunció a su cargo a mediados de septiembre para cursar un doctorado.
“Cuando nos piden manipular la base de datos, que aunque no se haya hecho, se tomó una decisión que si bien no es falta administrativa, sigue siendo reprochable por una decisión de no informar todo lo que se podía informar”, sostuvo en su declaración, explicando que no renunció antes para cambiar desde adentro la situación.
La profesional es psicóloga de la Universidad Católica, magíster en Salud Pública en Toronto, magíster UC en Epidemiología y ahora estudia en la Universidad de Toronto. Además, según informa Ciper, también fue parte hasta 2017 de la Comisión de Salud de Revolución Democrática.