Como “arriesgado”, “inconsistente” y “un error que puede poner en riesgo el control de la pandemia” fue calificado por especialistas el anuncio del Gobierno que abre la puerta a reuniones familiares durante Fiestas Patrias, incluso en comunas con cuarentena.
En buenas cuentas, la medida permitirá que en cada hogar se pueda recibir -entre el viernes 18 y domingo 20 de septiembre- a cinco personas y en lugares abiertos hasta 10 invitados, para lo que se deberá solicitar un permiso en la página de Comisaría Virtual de Carabineros, sin importar la fase del plan Paso a Paso vigente.
Y aunque el ministro de Salud, Enrique Paris, defendió este jueves el anuncio, al asegurar que “fue muy meditado” y “muy conversado”, varios expertos salieron rápidamente a cuestionar la idea por las consecuencias fatales que podría traer aparejada, considerando que varios focos de contagios se dieron justamente en reuniones familiares.
Sin ir más lejos, la primera víctima que murió por el virus en Chile se contagió durante una actividad de estas características.
“En Chile aún nos encontramos en fase de transmisión comunitaria, con un alto riesgo (de contagiarnos) cuando salimos del hogar, cuando hacemos un traslado o nos juntamos con alguien”, dice María Paz Bertoglia, académica de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Chile y presidenta de la Sociedad Chilena de Epidemiología (Sochepi).
“Es por eso que hemos visto con gran preocupación que por parte de las autoridades han decidido suspender la cuarentena (de manera estricta). Las autoridades deben avanzar en este momento en robustecer toda la estrategia para minimizar los impactos sanitarios”, agrega.
“Suspender las cuarentenas cuando existe transmisión comunitaria -finaliza- consideramos que es un error que puede poner en riesgo el control de la pandemia en nuestro país”.
“Es momento de llorar nuestros muertos”
Consultado por BioBioChile, el doctor en Salud Pública y académico de la Facultad de Ciencias Médicas de la Usach, Christian García, asegura que la relajación de las restricciones anunciada por el Gobierno “va en dirección contraria a cualquier lógica epidemiologica”.
Al igual que Bertoglia, el especialista afirma que “aún Chile sigue con muchos casos”, lo que lamentablemente va de la mano con una “trazabilidad paupérrima” que recién se comenzó a implementar en julio, de manera “muy tarde y peligrosa”.
“La recomendación para las personas -agrega- es que sigan todo igual (…) Este 18 es un momento de reflexión y de llorar nuestros muertos, más de 15 mil fallecidos”, sentenció.
“Es pavimentarle el camino al virus”
Según explica Geraldine Vives, experta en salud pública y directora de la Escuela de Odontología de la Universidad Diego Portales, la medida del Minsal “es un riesgo en el que se endosa absolutamente la responsabilidad a las personas de manera individual” y que por lo demás “no va a ser viable de fiscalizar”.
“La consecuencia de aquello -señala- finalmente es un mayor número de muertes. Si se contagian 200 personas pueden morir entre uno y seis (pacientes) de acuerdo a los indicadores actuales que conocemos del virus”.
“Aquí se plantea la mitad de la informacion (…) pero no se les comunica el riesgo de aquello. Las personas en función de esta comunicación que existe están creyendo un poco de que ya pasó lo peor y que podemos volver a retomar la vida que teníamos antes y eso es muy arriesgado y una mala estrategia”, fustiga.
El anuncio del Gobierno será materia de debate el interior del consejo del Colegio Médico previsto para este viernes, aunque Germán Acuña, presidente del organismo en la región del Bío Bío -una de las zonas más afectadas durante las últimas semanas- llamó al Ejecutivo a que “no abra puertas para reuniones y que mantengamos el espíritu de las cuarentenas”.
“Si en estas Fiestas Patrias nos infectamos o nos morimos vamos a lamentar para siempre el peor 18 de nuestras vidas”, sostuvo mediante un mensaje difundido por el Colmed en Twitter.
Desde el mundo político también hubo reacciones. El diputado Juan Luis Castro (PS) aseguró que lo señalado por la autoridad sanitaria es un “absurdo”.
Así, el también expresidente del Colegio Médico sostuvo que “es pavimentarle el camino el virus”, pues “no contribuye en nada a frenar la transmisión que aun existe”.
Paris “medita” la medida
Temprano esta mañana, el ministro de Salud, Enrique Paris, salió al paso de las críticas, al asegurar que “vamos a vigilar” la medida y “meditar más si es que hay gente que piensa que es riesgoso”.
En esa línea afirmó que recibió llamados de autoridades de las regiones con mayor circulación viral (entre ellas Bío Bío), por lo que se revisarán los casos particulares de aquellas zonas que hayan expresado su preocupación.
“Siempre digo que hay que dialogar, que hay que conversar que las cosas, hay que meditarlas y obviamente si hay que retroceder o tomar otras medidas en algunas regiones especiales lo haremos, sin lugar a dudas”, aseveró.
Consultado por el anuncio, dijo que “no hubo ningún apresuramiento, fue muy meditado, fue muy conversado, se pensó en la familia, aquí no se pensó en las grandes fiestas… es para que la familia se reúna y no salga justamente fuera de las casas a celebrar a las fondas”.
Y finalmente apuntó a las críticas de los especialistas: “¿Qué expertos? ¿Qué cifras han dado? ¿Qué números? Porque generalmente los que critican, los expertos entre comillas, no dicen cifras, no dicen números, no dan estadísticas, en cambio a nosotros sí nos exigen estadísticas, números, cifras”, lanzó.