Una víctima de violaciones de Derechos Humanos en dictadura, presentó un recurso de protección en contra de Carabineros de Chile tras conocerse que la Academia de Ciencias Policiales de la institución llevará el nombre del ex General Director Rodolfo Stange.
Se trata de Estela Ortiz, viuda de José Manuel Parada, víctima en el “Caso Degollados”, quien interpuso la acción en contra de la institución encabezada por el General Director Mario Rozas, señalando que el cuerpo policial “no ayuda a reconciliar el país ni a honrar a las víctimas de ayer y hoy”.
“Nunca han pedido perdón por sus acciones, las que han dejado una fisura en nuestra Historia. Cada cierto tiempo realizan acciones provocadoras, que dividen a Chile”, puntualizó.
La ex secretaria ejecutiva del Consejo Nacional de la Infancia detalló que, en el marco de la investigación del “Caso Degollados”, Carabineros mantuvo una actitud de encubrimiento, y recordó que “uno de los más altos oficiales que ayudó a esconder la verdad fue el entonces Subdirector, posterior General Director y miembro de la Junta Militar, desde agosto de 1985, Rodolfo Stange”.
El “Caso Degollados” ocurrió el 30 de marzo de 1985, y en éste, José Manuel Parada, Manuel Guerrero y Santiago Nattino fueron secuestrados, torturados y asesinados.
En este contexto, el ministro Milton Juica denunció a Stange por los delitos de incumplimiento de deberes militares y obstrucción a la justicia por su rol en la indagación de las muertes.
En la gestión de Rodolfo Stange, se realizaron crímenes de lesas humanidad, los que han sido por el Estado chileno en el Informe de la Comisión Nacional de Verdad y Reconciliación (Informe Rettig), así como en el Informe de la Comisión Nacional sobre Prisión Política y Tortura (Comisión Valech).
“Siento que nos vuelven a golpear a mí, a mis hijos y nietos. Siento impotencia, dolor, rabia e indignación. Nos piden que perdonemos, que demos vuelta la hoja… ¿Podemos?“, señaló Ortiz.
Así, agregó que Carabineros con sus acciones “han dejado una fisura en nuestra Historia. Lamentablemente, cada cierto tiempo, realizan acciones provocadoras que dividen a Chile”.
“Somos personas que amamos la vida. Hemos logrado, en estos 35 años, transformar el odio, el horror, dolor y la impotencia que dejó la ausencia de José Manuel, Santiago y Manuel en vida, en acciones por la paz, la justicia y la democracia en Chile”, resaltó Ortiz.
“Hoy le pido perdón a mis hijos y a los niños que me han rodeado en la vida. Pensé que 35 años después Chile sería un país digno para todas y todos, pero me equivoqué… Hoy me vuelven a matar un poco”, enfatizó.
Con este recurso, Ortiz exige dejar sin efecto el homenaje y que se adopten las medidas para evitar que se repitan hechos similares.