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Sicariato, usurpación de terrenos y drogas. Todo eso forma parte del perfil del hombre acusado de estar detrás del crimen que sacudió a Concón. Alejandro Correa, ingeniero y empresario de la zona, fue ejecutado en la puerta de su casa. Las razones hasta ahora se mantienen ocultas, pero una demanda presentada por la víctima poco antes de su muerte podría dar luces de qué fue lo que gatilló el crimen.
Cabizbajo y con la mirada fija en el suelo, clásica expresión de quien cae en manos de la policía, Renato López Fuentes fue sacado este martes por la PDI, para comenzar un proceso que podría terminar con él tras las rejas por un largo tiempo.
Este miércoles el hombre deberá enfrentar a la justicia para su control de detención y formalización, al ser capturado en calidad de autor intelectual del homicidio de Alejandro Correa Correa (60), empresario de Concón que murió tras ser acribillado en las afueras de su hogar.
Justamente a López Fuentes se le acusa de haber contratado -por 5 millones de pesos- a Víctor Gutiérrez Londoño (34), alias “El Parce”, para dar muerte al ingeniero.
Hasta ahora, poco y nada se sabía de las razones detrás del asesinato, en parte porque “El Parce” guardó un largo silencio respecto de su empleador, quien se mantuvo en las sombras hasta este martes. Sin embargo, una demanda -que revela BioBioChile- podría dar luces sobre lo que está detrás del crimen.
Drogas, usurpación de terrenos y sicariato son parte del perfil de quien hoy es sindicado como la mente que planeó el homicidio que conmocionó el exclusivo sector de la región de Valparaíso.
La disputa
No está claro desde hace cuánto tiempo víctima y acusado se conocían. Tampoco se advierte con profundidad qué tipo de relación existía entre ambos. Pero lo que sí se sabe a ciencia cierta es que al menos desde 2019 existía una disputa que terminó abruptamente con el asesinato del empresario.
Así quedó plasmado en una demanda presentada por Alejandro Correa en 2019, cuando -en un intento por recuperar lo que le pertenecía- le imputó a López Fuentes el haberse tomado su terreno.
En buenas cuentas, la acción legal ingresada por el afectado ante el Segundo Juzgado de Letras de Quilpué advertía que quien hoy está sentado en el banquillo de los acusados había ocupado “a la mala” un conjunto de lotes de su propiedad.
El lugar en cuestión se emplaza en Calicheros, un sector al sur de esa comuna conocido por tomas de predios, especialmente en manos de vecinos que exigen soluciones habitacionales. Allí -sin mayor aviso- López Fuentes cerró el espacio y lo convirtió en un centro de acopio y entrada para su terreno contiguo.
Y aunque en varias oportunidades el demandante le pidió que se fuera del lugar, su contraparte nunca lo desocupó, aparentemente porque le servía para expandir las extracciones de áridos que él impulsaba.
Todo ello redundó justamente en la acción judicial de Correa, a la que -según consta en el documento- se vio “obligado” para que se le restituyeran los bienes “que ocupa la (parte) demandada, sin tener título alguno para ello”.
El antecedente
La acción legal presentada por Correa no fue la única que ha debido enfrentar López Fuentes. A fines de 2016 un particular lo demandó por un caso similar, lo que podría venir a confirmar el modo en el que operaba.
Según consta en el escrito ingresado ante el Segundo Juzgado Civil de Viña del Mar, el 26 de noviembre de ese año el acusado otra vez irrumpió en un terreno, esta vez en la ex Hacienda Reñaca, emplazada en la parte alta de ese sector de la ciudad jardín.
Allí, sin mediar palabra y en una acción violenta -según se describe-, el imputado derribó el portón y literalmente expulsó de la propiedad al dueño del lugar.
“A las 10:00 horas se presenta el querellado con un grupo de 15 personas que procedieron a derribar el portón de entrada de mi propiedad y a ingresar masivamente a ella, con el fin de iniciar las acciones para cercar la propiedad, aduciendo que había comprado la parcela que ocupo y sobre la cuál ejerzo derechos sea de posesión o mera tenencia”, versa el escrito.
“Se pidió la intervención de carabineros denunciando el acto violento de que era víctima junto a mi familia, quienes no pudieron intervenir en nuestro favor, porque, según ellos, ese señor era el dueño”, añade.
“Pero, todavía -agrega- no conozco el título y la tradición y aun así, carece de derecho de ejercer la justicia por sí mismo, amparado en el poder del dinero que dice tener y en el apoyo de un grupo de hombres que nos amenazaron con causarnos daños a mi persona y bienes”.
La causa se encuentra actualmente archivada.
La formalización
Al menos una investigación más cierra el perfil de López Fuentes. ¿La razón? Tráfico de drogas. En 2009 se le ordenó ingresar a prisión preventiva, precisamente por ese delito, pero con los antecedentes a la vista, todo indica que habría vuelto a la senda criminal.
En un horario aun por conocerse, este miércoles la Fiscalía lo formalizará por el crimen en Concón. Se espera que en la ocasión se conozcan más detalles de una causa que se ha trabajado sigilosamente por el Ministerio Público y que actualmente se encuentra en calidad de “reservada”.
López Fuentes se transforma así en el cuarto detenido por este hecho del que sería cabecilla: primero fue arrestado “El Parce”, quien -como ya se dijo- es sindicado como el asesino a sueldo, y luego cayeron la pareja de este último, Melissa Palma Valdés, y Claudio Riveros Canales, chofer del taxi en el que se desplazó el sicario.
(Artículo 04 del Código Procesal Penal)
