El presidente Sebastián Piñera promulgó este viernes la reforma constitucional que limita la reelección de autoridades, incluyendo parlamentarios y otros cargos electos.
En la instancia, sostuvo que “últimamente hemos observado un deterioro en la calidad de la política, un debilitamiento de algunas de nuestras instituciones fundamentales, y un distanciamiento entre los ciudadanos y la política”.
“Esa no es una buena noticia, y todos tenemos la obligación de enmendar el rumbo”, planteó el mandatario.
La promulgación se produce pese a la resistencia de algunos sectores políticos, viéndose incluso la probabilidad de que el Ejecutivo ingrese un veto al proyecto para excluir a los alcaldes por el periodo que viene. El plazo para que el Gobierno opte por esta opción vencía este viernes, lo que finalmente no ocurrió.
La posibilidad contaba con el apoyo de parte importante del oficialismo, pero era rechazado ampliamente por la oposición.
Finalmente, en su discurso, el mandatario afirmó que la ley se alinea con los compromisos del Gobierno en la última Cuenta Pública, argumentando que “contribuye al perfeccionamiento de nuestra democracia, porque permite en primer lugar facilitar una mayor renovación, una mayor oxigenación en los cargos de elección popular”.
Además, “permite una mayor igualdad de oportunidades para que todos los ciudadanos puedan postular a los cargos de elección popular” e “interpreta y da respuesta a una amplia y profunda demanda de los ciudadanos por mayor renovación, por mayor participación y por mayor transparencia en nuestra democracia”.