Los senadores Francisco Chahuán (RN) y Guido Girardi (PPD) pidieron que el Gobierno respalde el proyecto que obliga a los supermercado y a las empresas donar los alimentos que están próximos a ser desechados.

Un apoyo mayoritariamente transversal tiene en el Senado el proyecto de ley que busca obligar a supermercados y empresas del retail donar los productos comestibles en buen estado y próximos a ser desechados, ya sea por su deterioro de envase, que estén mal rotulados, o por la cercanía de vencimiento.

El proyecto es patrocinado por los senadores Girardi y Chahuán, y busca que dichos alimentos sean entregados antes de vencer a instituciones sin fines de lucro que se dediquen a la distribución de los mismos a personas que lo necesiten.

Según el senador Girardi, la iniciativa busca “impedir la pérdida de alimentos. Queremos que en vez de perdida de alimentos, hoy los grandes retail, los grandes supermercados, estén obligados a entregar esos alimentos antes que se venzan”.

La idea es realizar esa entrega “cuando todavía los alimentos son seguros o cuando tienen manchas en los envases o cuando están mal rotulados, estos alimentos se entreguen en forma gratuita y obligatoria a instituciones sin fines de lucro, que entreguen y distribuyan esos alimentos a las personas que no tienes acceso”.

“Es un proyecto internacional que no tiene color político, respaldado por distintos sectores, que se basa en recomendaciones de Naciones Unidas, FAO Chile y la red ‘Parlamentarios contra el Hambre’ de América Latina y Caribe”, sostuvo.

Asimismo, mencionó que “hay muchos chilenos y chilenas que no van poder acceder alimentos, la pandemia seguramente se va a prolongar y la crisis económica se va prolongar y no es aceptable que exista perdida de alimentos”.

“Cerca del 30% de los alimentos se pierden en Chile y en el mundo. Solo en Chile se pierden más de 100 millones de lechugas al año. Se pierde una parte importante de la jibia, de la merluza, de las papas”, aseguró.

Por su parte, el senador Francisco Chahuán llamó a “aprobar proyecto ‘Cero Desperdicio’, es una acción de lucha contra el hambre, algo clave en tiempos de crisis (…) Es un gran avance, concordante con FAO que, además, establece una sinergia pública-privada orientada a la economía circular”.

Piden urgencia al Gobierno

Este jueves los senadores solicitaron al Ejecutivo que respalde y ponga urgencia al proyecto de ley, sobre todo debido a la crisis sanitaria que también afecta a lo sectores más vulnerables y que ha generado protestas por falta de alimentos.

La iniciativa, que se encuentra en primer trámite constitucional, fue vista el miércoles pasado por la Sala del Senado y a petición de la senadora Luz Ebensperger, fue devuelto a la Comisión de Salud para ser revisada nuevamente, pues según la parlamentaria —argumentando con una minuta gubernamental— se trataría de alimentos de “segunda mano”, que “perderían inocuidad” y que al ser obligatorio sería “una expropiación”.

En ese sentido, Chahuán señaló: “Yo espero que en estas dos semanas que tenemos para indicaciones el Ejecutivo se involucre en la discusión, lo que no puede ocurrir es que el Gobierno mire para el lado respecto al avance de este proyecto, y luego pida a los senadores de la coalición votar en contra del mismo, cuando son proyectos que buscan en parte resolver el hambre, y lo digo con todas sus letras, en momentos de crisis como la que estamos viviendo en el país”.

Por su parte el senador Girardi dijo que el proyecto “tiene iniciativas equivalentes en muchos países desarrollados donde los productos que pierden su valor económico y que, pese a ser inocuos serán desechados, puedan ser reutilizados. Incluso en naciones como Alemania donde es parte de su cultura el compromiso con la sustentabilidad y el medio ambiente”.

En tanto Darío Contreras, de la Fundación Retroalimenta, señaló que le preocupa que “la minuta del Gobierno habla de alimentos de segunda categoría, tratando de hacer creer que se trata de alimentos vencidos y no es así. Chile adquirió compromisos ambientas que no cumple al rechazar este proyecto, pues el impacto medio ambiental de los alimentos desechados es muy grande. Ojala se vote a la brevedad y se superen los miedos que trataron de introducir al tema”.

Finalmente, Pilar Guillorf, presidenta del Comité Nacional para la Prevención y Reducción de las Perdidas y Desperdicios de Alimentos —que reúne a más de 50 organizaciones— dijo que “respaldamos completamente esta iniciativa y manifestamos nuestra disposición a apoyarla. En Chile ya tenemos una Red y un Banco de Alimentos en Santiago, en Lo Valledor y el Banco Solidario en Bio Bío que recibe productos del mar. Esto no es algo imposible de hacer, la diferencia es que este proyecto obligará a aquellos supermercados o empresas que no lo hacen de manera voluntaria”.