Durante la mañana de este jueves, el ministro de la Corte Suprema, Jorge Dahm, confirmó que acogió la solicitud de extradición de Nicolás Zepeda realizada por Francia.
El joven chileno, hasta la fecha, es el único acusado en dicho país por la desaparición y muerte de su expareja, la japonesa Narumi Kurosaki, en diciembre de 2016, por lo que -en su petición- el estado francés afirma que el crimen fue premeditado y que Zepeda habría asfixiado a su exnovia.
En ese contexto, el fallo de primera instancia enfatizó que “es posible estimar que existen antecedentes con fundamento serio, cierto y grave, que permiten sostener que la última persona que estuvo con Narumi fue Nicolás. Después de ello ella desaparece. Mantuvieron una relación afectiva que terminó de mala manera tiempo antes, ruptura que no fue aceptada por Nicolás, dado los términos en que se refieren los múltiples mensajes que le dirigió”.
“A ello cabe agregar los múltiples desplazamientos que realizaba en Besançon antes de encontrarse con Narumi, como asimismo su conducta después de su desaparición, lo que permite concluir que con tales antecedentes se había dictado una acusación en contra del requerido como autor del ilícito de homicidio calificado”, añade el texto.
En tanto, también desestimó el alegato de la defensa, que aseguraba que no había antecedentes suficientes “por las circunstancias de no haber sido hallado cadáver, ni vestigios de este”, ya que “de acuerdo con lo que dispone el Código Procesal Penal chileno y disposiciones procesales francesas, es posible probar la muerte de una persona no sólo mediante la presencia de su cadáver, sino que por los demás medios de prueba que franquea la ley”.
Tras dar a conocer la resolución, Dahm remarcó que -a su juicio- existen antecedentes suficientes para realizar una acusación contra Zepeda.
Asimismo, precisó que esta instancia “no se trata de un juicio en el que se estime la absolución o la condena”, subrayó en conversación exclusiva con Radio Bío Bío.
Por su parte, Antonio Segovia, director de Cooperacion Internacional y Extradiciones de la Fiscalia de Chile, se mostró conforme con el resultado y aseguró que la determinación -a su parecer- se ajusta “a las normas legales nacionales e internacionales que rigen el proceso de extradición”.
Asimismo, destacó los “contundentes antecedentes que ha aportado el estado requiriente para poder acreditar el delito que se le imputa a Nicolás Zepeda”.
Con todo, la defensa del chileno aún tiene una segunda instancia de apelación ante la Segunda Sala del máximo tribunal de nuestro país.