Esta noche, en cadena nacional el presidente Sebastián Piñera presentó el proyecto del Gobierno para modificar el sistema previsional, apuntando a mejorar especialmente las pensiones de las mujeres, la clase media y adultos mayores con dependencia severa.
La propuesta había sido adelantada ya por el Gobierno, tras calificar de “insuficiente” la iniciativa impulsada por la oposición, acusando que no se hace cargo de los problemas de largo plazo.
Entre las sugerencias de la oposición se incluye elevar en 6% la cotización, con cargo al empleador, para un fondo colectivo con lógica de reparto, crear un ente público, una pensión básica universal garantizada y que las AFP destinen el 30% de sus utilidades al Pilar Solidario.
Por su parte, Piñera destacó la Agenda Adulto Mejor encabezada por la primera dama, Cecilia Morel, la Agenda Social, la Agenda Antiabusos, y anunció que esta semana será enviado al Congreso el proyecto del ejecutivo en materia de pensiones.
Indicó que ésta se sumará a la reforma ya aprobada que permitiría un aumento de un 50% en las pensiones del Pilar Solidario, favoreciendo a cerca de 1,6 millones de chilenos. Asimismo, el mandatario agregó que se buscará garantizar, con este proyecto y el que mejora el Pilar Solidario, “que ningún pensionado quede por debajo de la línea de la pobreza” -que actualmente está en $168.000-, y que ninguno con al menos 30 años de cotización esté bajo la línea del sueldo mínimo expresado en UF -que actualmente está en $301.000-.
“Esta nueva reforma representa un cambio estructural y crea un nuevo sistema previsional basado en tres pilares”, explicó el mandatario, indicando que uno será el Pilar Solidario, financiado por el Estado; el Pilar de Ahorro Individual, financiado por trabajadores y empleadores; y el Pilar de Ahorro Colectivo, “financiado por los empleadores y también con un aporte inicial del Estado”.
Afirmó que esta reforma beneficiará a 1 millón de pensionados “y va a significar aportes adicionales al Ahorro Previsional de los trabajadores y a las pensiones que reciben los jubilados”.
Según indicó, esto representaría un aporte de 3% adicional y gradual, “que será de cargo del empleador y que se va a sumar el 10% actual y complementará el ahorro previsional de cada trabajador. Esto en régimen va a significar un aumento del 30% en las pensiones”.
Asimismo, se crearía un Fondo de Ahorro Colectivo y Solidario, que se financia con un aporte adicional y gradual de 3%, de cargo del empleador y un aporte inicial del Estado. Este Fondo Solidario va a entregar una pensión adicional a aquella financiada con ahorros propios o del Pilar Solidario, a los jubilados actuales y futuros, y va a beneficiar en forma muy especial a las mujeres, a la clase media y a los adultos mayores con dependencia severa”.
Los beneficios estipulados según demografía
Este proyecto, afirmó, permitiría que los actuales pensionados, que tengan un número mínimo de cotizaciones y apenas se apruebe esta reforma, reciban “un aumento significativo de sus pensiones”.
En el caso de los hombres, indicó, este aumento será de 2 UF ($56.600 mensuales), lo que significaría “un aumento promedio de 20% de sus pensiones y beneficiará a más de 500 mil pensionados”.
En el caso de las mujeres se calcula un aumento de 2.5 UF ($70.800 mensuales) que significaría “un aumento promedio de 32% de sus pensiones y va a beneficiar a más de 350 mil pensionadas”.
Afirmó que los futuros pensionados que completen un número mínimo de cotizaciones, número que aún no ha sido determinado, recibirán “estos mismos incrementos en sus pensiones, pero, además, recibirán un aporte
adicional, cuyo monto va a ir creciendo con el número de años cotizados después de esta Reforma, de forma de incentivar el ahorro previsional de todos los trabajadores chilenos”.
En tanto, los adultos mayores con dependencia severa recibirán además un incremento adicional de sus pensiones en línea con los mayores gastos que deben asumir.
Cambios concretos al sistema de pensiones
La propuesta del Gobierno plantea un 6% de cotización adicional, tal como el de la oposición. Sin embargo, el Ejecutivo plantea que el 3% vaya a las cuentas individuales de ahorro y otro 3% para el ahorro colectivo.
En contraste, la oposición pide que todo el 6% vaya al ahorro colectivo.
“Todos los recursos de este 6% de cotización adicional, que son de cargo del empleador, serán administrados por una Institución Pública Autónoma y con muy exigentes requisitos de sustentabilidad, profesionalismo, eficacia y transparencia”, acotó.
Además, propone devolver parte de las comisiones cuando la rentabilidad sea negativa: “las Administradoras tendrán que devolver, a las cuentas de ahorro individual de sus cotizantes, parte de las comisiones cobradas cuando la rentabilidad del Fondo sea negativa. Y así ponemos a ambos en la misma dirección y con la misma motivación. Además, las Administradoras no podrán cobrar comisiones por inversiones en Fondos Mutuos Nacionales, se restringirá el cobro de otras comisiones por servicios de inversión y deberán pagar las cuotas mortuorias de aquellos afiliados fallecidos que no puedan cubrir este gasto”, indicó.
Igualmente, anunció medidas para permitir mayor participación de afiliados y de fiscalización.
Entre otras cosas, sostuvo, la reforma permitiría la integración de nuevos actores al sistema, incluyendo sociedades sin fines de lucro y cooperativas de afiliados, “de forma de fortalecer la competitividad de la industria, mejorar la calidad de los servicios, reducir las comisiones cobradas y permitir que los afiliados puedan participar en la creación de nuevas Administradoras”.
“Vamos a introducir mayor participación de los afiliados en la gestión de sus ahorros previsionales, a través de la creación de un Comité de Afiliados, la participación de un afiliado en el directorio de cada una de las Administradoras, una mayor participación del Comité de Usuarios del Sistema de Pensiones en la votación que hacen las Administradoras para designar directores en las empresas donde invierten fondos previsionales y también la creación de una Intendencia de Protección de Derechos de los Afiliados en la Superintendencia de Pensiones”, indicó.
En este sentido, afirmó que el ya constituido Consejo Consultivo Previsional deberá revisar periódicamente los parámetros del sistema, “incluyendo las tablas de expectativas de vida, de forma de proponer nuevos perfeccionamientos que aumenten la competencia y la transparencia del sistema y, sobre todo, que aseguren el pago de pensiones dignas y adecuadas para siempre”.
Finalmente, agregó que la ya implementada reforma al Pilar Solidario, junto a esta iniciativa, permitirían beneficiar a más de 2 millones de pensionados chilenos, “lo que representa más del 85% del total de pensionados de nuestro país, que van a recibir incrementos en sus pensiones superiores a $ 55 mil mensuales”.
“Ambas reformas tienen un costo muy significativo, y van a exigir un gran aporte y un tremendo esfuerzo del Estado, y tenemos que enfrentar con responsabilidad las finanzas públicas”, adelantó.