Este miércoles, la sala de la Cámara de Diputados efectuó un minuto de silencio en conmemoración de los 46 años del Golpe de Estado de 1973.
Todo esto, en memoria de las más de 3.000 víctimas –entre muertos y desaparecidos- que dejó la dictadura militar de Augusto Pinochet. De las casi 1.200 personas que permanecen desaparecidas en Chile, sólo un poco más de un centenar han logrado ser ubicadas. Muchos fueron lanzados al mar o sus cuerpos dinamitados.
De la instancia, como ha hecho anteriormente, se restó el diputado ex-UDI Ignacio Urrutia y el UDI Sergio Bobadilla.
El parlamentario RN Francisco Eguiguren salió también junto con ellos, siendo captado en fotografías, pero clarificó a BioBioChile que se trató de una llamada urgente y personal que debió atender, tras la cual regresó para participar “íntegramente” del homenaje.
El minuto de silencio se efectuó por solicitud de la diputada del Partido Comunista Carmen Hertz, quien hace sólo días -y tras 46 años- recibió los restos de su marido, Carlos Berger, ejecutado por la Dictadura.
Acotó que “si hay algo que hay que respetar en esta vida son los Derechos Humanos”, indicando que participó por considerar que el minuto de silencio “es un signo de respeto democrático hacia toda la ciudadanía, de un lado y de otro”.
Luego de la instancia, Hertz dijo no extrañarle la actitud permanente de Urrutia, acusando negacionismo, a lo que el parlamentario se defendió recordando que desde la jornada de ayer solicitó que se consideren las víctimas de “lado y lado”, incluyendo a miembros de las Fuerzas Armadas.