La Cámara de Diputados aprobó el proyecto de integración social y urbana del Gobierno, el cual, según el presidente Sebastián Piñera, permitirá “a muchas familias acceder a barrios con mejor infraestructura y oportunidades, revirtiendo segregación social y creando espacios más inclusivos”.

El ministro de Vivienda, Cristián Monckeberg, defendió la propuesta, que a su juicio busca la integración social y la equidad territorial.

El secretario de Estado confirmó, además, que la indicación rechazada en la Cámara de Diputados, que buscaba entregar a privados paños de terrenos fiscales para construir viviendas, no será repuesta en el Senado.

La aprobación de la iniciativa contó con el respaldo de la bancada de la Democracia Cristiana, excepto en lo relacionado con la entrega de paños de terreno fiscal a empresas privadas, ya que -como explicó el diputado falangista Miguel Ángel Calisto- esta idea afectaba de manera directa a los comités de vivienda.

Por su parte, el diputado de Convergencia Democrática, Gonzalo Winter, sostuvo que este proyecto de integración social podría modificar planos reguladores comunales ya sancionados, los que podrían ser pasados por alto por las inmobiliarias, en circunstancias determinadas por esta iniciativa.

En adelante, la iniciativa será analizada en la sala de la Cámara, para luego pasar a su segundo trámite en el Senado.