En punto muerto se mantienen las negociaciones entre el Gobierno y el Colegio de Profesores, para resolver el paro nacional indefinido que ya se extiende por quinta semana consecutiva. Desde el gremio indicaron que están preparados para prolongar la paralización durante las vacaciones de invierno, mientras la ministra de Educación sigue apostando por el desgaste de los docentes.

Pese la voluntad de diálogo que han expresado tanto el Colegio de Profesores como el Gobierno, para alcanzar una solución al paro indefinido que se ya se extiende por quinta semana consecutiva, aún no ha existido un acercamiento entre las partes.

Lo anterior, especialmente luego que la ministra de Educación, Marcela Cubillos, condicionara cualquier tratativa a que se depusiera la movilización, pese a que la semana pasada se conversó estando los docentes paralizados.

El presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, señaló que la secretaria de Estado está haciendo una “jugarreta comunicacional”, argumentando que si hasta ahora no han tenido respuestas satisfactorias, habrá menos posibilidad de llegar a un acuerdo si no siguen movilizados.

Además, Aguilar sostuvo que de todas formas están preparados para extender el paro incluso durante las vacaciones de invierno, pese a la estrategia que ha usado la ministra Cubillos de desgastar la movilización.

“Lo que está haciendo el Gobierno es una jugarreta comunicacional, porque no tenemos confianza en que una vez depuesto el paro vaya a haber soluciones a los problemas que estamos planteando”, señaló.

“Nosotros hemos sorteado anteriormente situaciones donde inician las vacaciones, tenemos previsto un plan de acción para continuar la movilización durante ese periodo. Ojalá no lleguemos a eso, pero si hay que hacerlo obviamente estamos preparados”, advirtió.

“Que el Gobierno escuche: estamos disponibles a dialogar, a reanudar las conversaciones, pero es el Gobierno que está cerrado a negociar”, dijo Aguilar, durante una marcha realizada este miércoles por la Alameda para exigir al Gobierno que retome las negociaciones tras un mes de paro nacional en reclamo de mejoras laborales y en el sistema educativo.

En la movilización participaron también estudiantes y padres que igualmente pidieron a las autoridades volver al diálogo, luego de que el profesorado rechazara el lunes una propuesta del Ministerio de Educación.

Al final de la manifestación, un grupo de encapuchados se enfrentó a Carabineros, que dispersó las escaramuzas con agua y gases lacrimógenos.

La ministra de Educación, en tanto, respondió los últimos emplazamientos del Colegio de Profesores llamando a deponer la paralización. Sin embargo, Cubillos no dio luces de algún acercamiento con el gremio, ni menos de la baja valoración que hizo la última encuesta Cadem de su gestión, evitando atribuir alguna responsabilidad por su estilo para enfrentar los conflictos.

“Yo creo que aquí el principal dato y lo más importante de todo, es que no se perjudique más la educación pública. Eso es el verdadero dato que a nosotros como Ministerio de Educación nos preocupa, de qué manera recuperamos la confianza de la gente en la educación pública”, aseguró.

“Al mismo tiempo, creo que aquí lo que verdaderamente importa es qué valoración hacen las familias que están afectadas por ese 15% de colegios que sigue en paro”, reiteró.

En cuanto a la piedra de tope del conflicto, que dice relación con el pago de la mención para las educadoras diferenciales y de párvulos, desde el gremio indicaron que fue el propio subsecretario de Educación, Raúl Figueroa, quien planteó durante la negociación pagarla de forma diferida.

Sin embargo, después el Gobierno no lo validó, tal como lo indicó el secretario general del Colegio de Profesores, Darío Vásquez.

“Nosotros le hemos buscado con toda la flexibilidad de llegar a acuerdo, incluso esa propuesta de pagar en cuotas salió del propio subsecretario, él la planteó el año pasado, que estaba conversando con la Dipres, con el Ministerio de Hacienda, y que lo que estaban barajando era satisfacer la demanda nuestra, pero a través de un pago diferido en varios años”, relató.

Desde el Magisterio han insistido que el pago de la mención para las educadoras de párvulos y diferenciales es de toda justicia, ya que a los demás docentes sí se les paga, argumentando que es discriminatorio no hacerlo, más aún, cuando ha sido el propio Gobierno quien señaló que pondría el foco en la educación inicial.