El exministro de Transportes, durante la primera administración de Sebastián Piñera, Pedro Pablo Errázuriz, está generando un nuevo conflicto en La Moneda.
Errázuriz es, desde 2018, el presidente del Directorio de Ferrocarriles del Estado (EFE), pero, además, desde el 29 de abril de 2019, es miembro del directorio de Nuevo Pudahuel, empresa que administra el Aeropuerto de Santiago.
Dicha dualidad de cargo, en una empresa estatal y otra privada, ocurre en un contexto particular: uno en el cual la concesionaria del terminal aéreo resolvió enfrentarse al Ministerio de Obras Públicas (MOP), exigiéndole el pago de US$ 164 millones (más de $100 mil millones).
La empresa está exigiendo dicho monto al Estado por una razón específica. La construcción del aeropuerto, a cargo de otra empresa licitada por el MOP, se ha demorado más de la cuenta, lo cual ha generado consecuencias negativas económicamente para Nuevo Pudahuel.
Por lo mismo, vía Panel Técnico de Concesiones, la empresa exige compensación al Estado.
Es en ese escenario, donde se enfrenta el Estado con un privado por millonarios montos de dinero, que Errázuriz participa en ambos.
En tanto, la petición de compensación de Nuevo Pudahuel ya ha recibido el rechazo por parte del Gobierno: el nuevo ministro de la cartera, Alfredo Moreno, aseguró que se opondrán y defenderán los intereses de Chile.
Pero eso no es todo. Actualmente existe la discusión sobre el proyecto de tren rápido Santiago-Valparaíso y dos empresas presentaron sus alternativas, las que fueron declaradas de “interés público”. Sin embargo, una pasa por el Aeropuerto de Santiago y la otra no.
Radio Bío Bío entrevistó a Pedro Pablo Errázuriz, quien negó que haya conflicto de interés en su doble militancia y descartó renunciar, insistiendo en que ha sido “cuidadoso” en su toma de decisiones.