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El ministro de Justicia, Hernán Larraín, justificó la nominación de Dobra Lusic para ser ratificada como ministra de la Corte Suprema, pese a cuestionamientos por su eventual vinculación con el operador político John Campos y por su actuar en calidad de jueza.
El abogado Campos es un reconocido operador de la derecha en tribunales, quien fue condenado a pena remitida en 1997 por agresión a menores, cuando era jefe del Hogar de Cristo en Parral.
A través de una declaración pública, Larraín explicó que la postulación de Lusic -realizada por Sebastián Piñera- responde a varios criterios basados principalmente en la trayectoria y equidad de género.
“El Gobierno impulsa en sus nombramientos la mayor equidad de género y la magistrada Lusic es una mujer que representa a cabalidad esa dimensión”, sostuvo, y enfatizó en su “destacada trayectoria judicial durante 44 años”
Asimismo, respecto a los cuestionamientos en medios de comunicación, afirmó que no se han entregado todos los antecedentes que permitan “evaluar o explicar en forma debida sus decisiones”.
Por ello, comunicó que el Senado convocó a una audiencia pública para consultarle de estas interrogantes, tras lo que se tomará una decisión.
Respecto del llamado de Piñera a la cuestionada jueza para comunicarle la postulación, aseguró que es un acto de deferencia normal. “Ha sido hecho con antelación en otros casos y ha tenido lugar después que el Presidente había tomado la decisión de postularla formalmente al Senado, sin jamás interferir en la decisión que previamente había adoptado ese tribunal”.
Además, descartó una posible intervención de su parte -a través de un tercero- en favor de ella. “Jamás he intervenido personalmente ni he tomado contacto con persona alguna para insinuar o presionar a un integrante de la Corte Suprema para este u otro nombramiento, ni tampoco respecto de ninguna decisión que dicho tribunal deba adoptar”, sentenció.
Revisa la declaración completa a continuación:
