Los grupos negociadores, la extensión de beneficios, la última oferta y los servicios mínimos fueron algunos de los temas de mayor preocupación presentados por la mesa sindical ante el Gobierno para el proyecto de Reforma Laboral encabezado por el Ejecutivo.

La instancia, que incluyó representantes de la Central Autónoma de Trabajadores (CAT), la Confederación de Trabajadores de Chile (CTCH) y la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), estuvo trabajando por más de 2 meses, y junto a otra mesa compuesta por especialistas presentaron más de 50 propuestas en materia laboral.

En este sentido, el secretario general de la CAT, Alfonso Alfonso Uribe, explica que lo mejor sería la implementación de servicios de emergencias, argumentando que cuando estuvieron vigentes “nunca tuvieron problemas, siempre los trabajadores estuvieron presentes en esas situaciones e incluso ellos se ofrecían, porque a nosotros nos interesa que la empresa, una vez se resuelva el problema, siga funcionando porque es nuestra fuente de trabajo”.

En contraste, cuestionó la política de servicios mínimos, argumentando que son “una negociación sobre otra negociación”, ya que “si no se soluciona ese problema, no podemos entrar en el proceso de negociación colectiva, y por lo tanto retrasa, pone dificultades,” en el proceso.

“Los servicios mínimos son absolutamente nocivos porque debilitan la huelga de los trabajadores, porque son ellos los que deben cumplir estas funciones”, sostuvo el dirigente sindical. También dudó que sea la mejor idea establecerlos para todo tipo de empresas: “Yo soy profesor, y no sé cómo un colegio podría tener servicios mínimos para seguir funcionando”.

Dicho recurso “está pensados para proteger la productividad de la empresa, y se supone que la huelga es justamente para afectar ese elemento”, explicó, agregando que con éstos se expresa una desconfianza hacia los trabajadores en términos de seguridad de las instalaciones de las empresas.

A esto suma la necesidad de “que haya un organismo técnico real, porque la Dirección del trabajo no tiene la capacidad técnica como para poder estar evaluando los servicios de emergencia o los mínimos”.

Incertidumbre

En cuanto a la extensión de beneficios, “nosotros reconocemos beneficios históricos y sociales, que les llamamos de derechos humanos, que esos los deben gozar todos los trabajadores, no solamente los que han negociado”.

Otro tópico importante decía referencia sobre la incertidumbre en torno a los grupos negociadores, los que “lamentablemente están contemplados en la constitución, en el código del trabajo, y está lo que dijo el Tribunal Constitucional”.

Para esto último, defiende que se requieren medidas importantes: “Si queremos efectuar un cambio de fondo, tenemos que cambiar la Constitución”.

Cuestionó en este sentido a “los empleadores que tratan de fomentar los grupos negociadores paralelos al sindicato, cuando debería ser uno solo, y no debe haber grupos negociadores en las empresas donde haya más del 51% de trabajadores sindicalizados, sólo la organización sindical”.