En una carta publicada por El Mercurio, el cardenal emérito Francisco Javier Errázuriz se defendió de quienes lo acusan de encubridor y dijo que le sorprende que los denunciantes del exsacerdote Fernando Karadima desconozcan lo que él plantea como gestiones para que se abriera una investigación canónica sin considerar la prescripción de los delitos.

Asimismo, descartó protección al expárroco de El Bosque y aclaró que cuando hablaba de proteger se refería a los sacerdotes formados por el acusado.

Lo anterior pese a que en la carta de 2009, Errázuriz reconoció que pidió que la primera investigación contra Karadima no se tomará declaración por respeto.

Al respecto, Hellmut Kramer, de la Red de Sobrevivientes de Abusos Eclesiásticos Chile, consideró que genera rabia y dolor a las víctimas de abusos sexuales y pidió entregar toda la información sobre este tipo de casos.

“Actúan con total impunidad. Lo que hacen es burlarse”, manifestó.

En conversación con La Radio, Johan Bernal, uno de las denunciantes del excapellan de la FACh, Pedro Quiroz, dijo confiar en la investigación que lleva adelante el fiscal Emiliano Arias por la reapertura de su caso denunciado en 2010.

Bernal sostuvo que el vicario judicial de Iquique en la época, Franklin Luza, tomó su declaración y ocultó los delitos del acusado, cuyos antecedentes fueron enviados al obispo emérito de osorno, Juan Barros.

“Él me tomó declaración en 2011, él encubrió todo”, manifestó.

El caso de Quiroz ha llevado a la justicia a altas autoridades, entre ellos a Ricardo Ezzati. Asimismo, podrían citar a declarar a Santiago Silva, presidente de la Conferencia Episcopal.