El Instituto Secular Padres de Schoenstatt reaccionó tras la decisión del papa Francisco, quien expulsó del sacerdocio a Francisco José Cox Huneeus, arzobispo emérito de La Serena, señalando que se “evaluará médicamente” la posibilidad de traerlo a Chile en el marco de la colaboración con la justicia ordinaria.
Desde Schoenstatt señalaron que recibieron la noticia “con mucha vergüenza por el daño ocasionado a las víctimas. Solidarizamos con ellas y su profundo sufrimiento. Hoy más que nunca, deploramos todo acto de abuso que ofende la dignidad de las personas”.
En el texto, que firman Juan Pablo Catoggio, superior general, junto Fernando Baeza, superior provincial, los Padres de Schoenstatt apoyan “irrestrictamente esta decisión en justicia y verdad, por el bien de toda la Iglesia”.
La nota añade que los abusos sexuales contra menores de edad denunciados en los últimos meses contra Francisco José Cox, fueron investigados por la Congregación para la Doctrina de la Fe y llevaron a esta sanción. “Asimismo, ésta nos ha pedido expresamente que quede bajo el cuidado de nuestra Comunidad”, precisa.
Finalmente, reafirman su “firme disposición a colaborar con la justicia ordinaria en todo lo que sea pertinente y es por eso que pediremos una evaluación médica para determinar si es posible el retorno de Francisco José Cox a Chile”.