Lo dos chilenos detenidos en Malasia a la espera del veredicto por la muerte de una persona en un hotel de Kuala Lumpur relataron cómo han sido los 13 meses que llevan detenidos.
Se trata de Fernando Candia y Felipe Osiadacz, quienes esta semana recibieron una buena noticia, ya que Fiscalía propuso recalificar el delito pasando de un homicidio en primer grado a homicidio culposo.
Candia relató a La Tercera que ambos han logrado tener un pasar tranquilo en el recinto, donde “no ha habido mayores problemas con otros internos”.
En el lugar se han acercado a un argentino y un ucraniano condenados por drogas, delito que no implica riesgos al interior del recinto penal.
Osiadacz por su lado, señaló que en todo momento se ha sentido acompañado por su novia belga, quien ha asistido a todas las audiencias. “De no haber sido por ella, me habría suicidado”, dijo llorando.
Si bien ambos tenían planes en otros países antes de su detención, de irles bien en el juicio los dos pretenden retornar a Chile junto a sus familias.
Consultados sobre el recibimiento que podrían tener en el país considerando el delito del que están acusados, Candía precisó que “solo me importa lo que piense mi familia y mis amigos. Cada uno puede inventar lo que quiera, pero yo sé cuál es la verdad”.