La Iglesia de Aysén decidió suspender de sus funciones al sacerdote Porfirio Díaz Reyes luego que se concretara una denuncia de abuso sexual en su contra cuando era párroco de Puerto Aysén.

Según señaló el Vicariato Apostólico de esa región, la acusación fue “efectuada responsablemente al Consejo Cuidado y Esperanza” el pasado domingo 17 de junio de 2018.

En concreto, apunta a un eventual abuso sexual a una menor, el cual habría ocurrido en 2002 en la parroquia de la ciudad en la que ejercía el sacerdocio en esa época.

Ante ello, la Iglesia inició este lunes la investigación canónica preliminar correspondiente a la denuncia, según el “Protocolo ante denuncias contra clérigos por abusos de menores” de la Conferencia Episcopal de Chile de abril de 2011.

En tanto, “como medida cautelar, el presbítero Porfirio Díaz Reyes queda suspendido del ejercicio público de su ministerio sacerdotal mientras dure la investigación”.

Para ello, solicitaron “a quienes tengan elementos que aportar en relación al hecho investigado, u otro de similares características, puedan hacerlas llegar al correo electrónico previeneabusosaysen@gmail.com”.

En ese sentido, el Vicariato Apostólico de Aysén, liderado por Luis Infanti de la Mora, reafirmó su “compromiso con la verdad y la justicia”, al mismo tiempo que apeló al “llamado del Papa Francisco de procurar y garantizar ambientes sanos y protegidos en nuestras comunidades y obras pastorales”.