Tras la muerte de don Celino Villanueva, quien en vida fuera presuntamente el hombre más viejo del mundo, surgió la duda de quién ocupó su lugar después de su deceso.
Villanueva perdió la vida a los 121 años el miércoles 18 de abril y, en la ocasión, BioBioChile se contactó con una serie de servicios públicos para conocer la identidad del nuevo chileno más longevo del país.
Lo anterior, no obstante, no fue posible, ya que el Registro Civil aseguró que ellos “no tenían cómo saberlo”.
El Ministerio de Desarrollo Social, por su parte, anunció durante la jornada del miércoles que al interior de uno de sus centros residía la señorita María Teresa Martínez, quien cumplió 108 años el 1 de mayo.
Martínez, de esta forma, se transformó en la persona de más edad en vivir en la región del Maule, al igual que en los recintos que dependen de esta cartera de Gobierno y del Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama).
Pero, tras esa publicación, una serie de personas se contactaron con BioBioChile para compartir la historia de familiares y cercanos mayores que María Teresa.
Uno de ellos es el caso de Hortensia Hernández Sepúlveda, quien cumplirá 109 años este 13 de mayo. Sus nietos nos enviaron una fotografía de su cédula de identidad para comprobar que lo que decían era cierto.
Hernández fue hija única, tuvo siete hijos con su pareja y es abuela y bisabuela de muchos adultos y niños, tantos que su hija, María Albertina, admitió no recordar cuántos son.
Pese a que su estado de salud es excelente, sufre de demencia senil, lo que no le impide recordar brevemente -de vez en cuando- a los dos hijos que fallecieron antes que ella, aseguró María Albertina.
Su madre no cuenta con ningún tipo de ayuda estatal, aunque tampoco la han pedido. Sí recibe visitas de un médico que revisa su presión, su estado de ánimo y verifica su alimentación, la que es “muy buena” a juicio de su hija.
Junto a ella y su familia, Hernández “tiene todo el cariño del mundo”, motivo por el cual se reunirán como clan este sábado 12 para celebrar una nueva primavera de esta residente de la comuna de La Unión, región de Los Ríos.
Don Bernardo
También nos escribió Cecilia Salas por su padrino, Manuel Benavente Sanhueza, de 108 años, quien nació el 25 de septiembre de 1909 en Concepción, región del Bío Bío.
Actualmente reside en Ñuñoa, región Metropolitana, pero por años lo hizo en San Bernardo, comuna de la cual es hijo ilustre.
Según indicó El Rotario de Chile, organización de la cual es miembro, Benavente comenzó a trabajar a los 15 años en el Primer Juzgado de Letras de Coronel, tras lo cual se desempeñó por treinta años en la Casa de Moneda, donde llegó a ser subdirector.
Antes de salir de ese trabajo obtuvo el título de contador, con el cual fue -hasta los 100 años- secretario de la Cámara de Comercio de San Bernardo.
Para su ahijada es un “orgullo” conocerlo y tenerlo con vida e indicó que tiene una salud excelente. “Su cabeza la tiene buena, son sus piernas las que le fallan”, precisó Salas.
Su señora falleció hace años, pero con ella tuvo dos hijas. Una se radicó en Estados Unidos y la otra vive con él. Ambas le dieron cinco nietos a don Bernardo, quien es “alegre y bueno para la talla”, declaró su ahijada.
Ministerio de Desarrollo Social
BioBioChile tomó contacto con el Ministerio de Desarrollo Social para preguntarles acerca de la existencia de algún catastro de la población sobre los cien años en Chile.
Desde la cartera indicaron que ellos no saben de la realidad a nivel nacional ya que su responsabilidad se limita a conocer y aplicar ayudas en los recintos que dependen de ellos, como lo es el Establecimiento de Larga Estadía (Eleam) “Wenüiwen” de Licantén, donde reside María Teresa.
Y es que el deber de conocer y tener claras las identidades de quienes logran llegar al siglo de vida no es ellos, sino que del Registro Civil, servicio desde el cual -si recuerdan- sentenciaron que no tienen cómo obtener tal información.
Debido a lo anterior, el lugar que don Celino dejó vacío con su muerte sigue sin sucesor oficial.