Con preocupación reaccionaron diferentes actores de la Educación al nombramiento del abogado, presidente del directorio de Soprole, vicepresidente de Iansa y abogado de LarrainVial en el denominado Caso Cascadas, Gerardo Varela, como futuro ministro de Educación del gobierno de Sebastián Piñera.
Cuesta pensar que el futuro Gobierno no intentará, durante su mandato, corregir o echar abajo parte de la Reforma Educacional que ha impulsado esta administración, si se analiza el perfil del futuro titular de Educación designado por el presidente electo.
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Varela es abogado de la Universidad de Chile, experto en fusión de empresas y fue consejero del círculo legal de Icare, entre otros cargos. Sin embargo, lo que más causa rechazo entre los actores de la Educación es la visión que tiene de ésta.
En una columna publicada en el portal El Líbero el 19 de agosto de 2017, Varela aseguró que es falso sostener que la Educación es sólo un derecho social y no un bien de consumo.
A lo anterior, el abogado indicó que “la Educación es un derecho, aunque muchos no lo ejerzan y se mantengan en la más dulce de las ignorancias. La Educación escolar, además, es una obligación para los padres. Pero la Educación es también un bien económico“.
Tales declaraciones, para el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, son una amenaza para todo lo que se ha ido avanzando, mostrando la preocupación del gremio ante la “exacerbada visión neoliberal” que, a su juicio, tiene el sucesor de la asistente social y actual titular del ramo, Adriana Delpiano.
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Por su parte, el rector de la Universidad Católica del Maule, Diego Duran, ironizó con el nombramiento de Varela al Mineduc debido a su escasa experiencia en materias de Educación, más aún cuando el próximo Gobierno tendrá como misión implementar la Reforma Educacional, sobretodo en educación superior.
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Desde la Confech, Josefina Canales, presidenta de la FEUC, lamentó este nombramiento y agregó que quedó un gusto amargo en los estudiantes respecto de los espacios de diálogos con el próximo Gobierno.
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Otras opiniones
En la ya mencionada columna, Varela también planteó “la Educación es un mercado donde los colegios y universidades compiten entre ellos por los mejores alumnos”, sosteniendo que “la solución no es la Gratuidad ni la prohibición del lucro —y menos de la selección y el copago—, sino que cómo seguir atrayendo inversiones, competencia y talento“.
En cuanto a la Ley de Inclusión, el próximo ministro de Educación cree que este Gobierno “cegado por la ideología, ha despilfarrado plata focalizando gasto en el lugar equivocado; construyendo salas cunas que los padres no quieren usar; ha desatendido a más de 80 mil niños que dejan el sistema escolar; impidiendo divulgar mediciones de calidad que permitan comparar colegios”.
Además, cree que se “ha restringido el derecho de los padres a elegir el colegio y a que paguen para mejorar la Educación de sus hijos, expulsando al ahorro privado de la educación pública, donde se requiere con urgencia”.
“La última tontera son las tómbolas. ¿A quién se le ocurrió la barbaridad de que es más justo seleccionar al azar los alumnos que en un proceso racional de selección y diálogo entre colegio y padres?”, inquirió Varela.