Un álgido momento se vivió al inicio del debate Anatel realizado este martes, cuando Marco Enríquez-Ominami emplazó directamente a Alejandro Guillier por los polémicos dichos del diputado radical Fernando Meza.
El parlamentario realizó duras declaraciones a través de un grupo de WhatsApp. “Lo acabo de llamar y, como no me contestó, le dije que era un mal nacido. Que su padre (Miguel Enríquez), a quien sí conocí, si estuviera vivo le metería un tiro por traidor”, escribió Meza.
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El tema fue aprovechado desde el inicio del debate por ME-O, quien aseguró que en esta elección tanto Sebastián Piñera como Alejandro Guillier están inhabilitados, acusando al abanderado de la Fuerza de la Mayoría de tener un “asesor” que lo habría amenazado, en referencia a Meza.
Al respecto, el senador usó el derecho a réplica asegurando que “las contradicciones de Marco esta noche revelan que no está seguro de lo que está diciendo”, sin apuntar directamente a la acusación de ME-O.
Esto último, incluso fue destacado por José Antonio Kast, aprovechando una pregunta. “Alejandro Guillier no contestó sobre la violencia que un asesor tuvo con Marco Enríquez-Ominami. Eso es inaceptable”, sostuvo.
Ante el mutismo de Guillier, el abanderado del Partido Progresista insistió pidiéndole definir alguna medida en contra del parlamentario radical.
“¿Usted va a echar a un diputado que ofreció meterme balas?”, dijo ME-O.
“No he mandado matar a nadie, y menos a Marco, a quien le tengo afecto”, respondió finalmente Guillier, agregando que “una metida de pata de una candidato se aclara y no se magnifica”
No obstante, ante la consulta respecto a si sacaría de su comando a Meza, intentó en vano apelar al tiempo que se acababa pese a que le faltaban aún siete segundos. Finalmente, agregó que era “mejor silencio ante la tontera”.