En casi 60 mil millones de pesos fueron estimadas las pérdidas económicas a consecuencia de siete especies invasoras presentes en Chile. Por su parte, se hizo un llamado a controlarlas por el impacto que generan en la biodiversidad.
El conejo, el castor, la zarzamora, la avispa chaqueta amarilla, el jabalí, el espinillo y el visón son las siete especies consideradas invasoras por el Ministerio del Medio Ambiente, en base a un estudio elaborado por la Facultad de Ciencias Forestales de la Universidad de Chile.
La investigación cuantificó pérdidas económicas también a 20 años y estimó, además, que de no hacer nada para controlar a estas especies, Chile habrá perdido más de 1.991 millones de dólares.
El estudio establece que de las 100 especies invasoras mas dañinas de todo el mundo, Chile tiene 26 y causan un daño a las especies endémicas, nativas chilenas, según lo explicó la académico a cargo del estudio, Claudia Cerda.
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El ministro de Medio Ambiente, Marcelo Mena, afirmó que el estudio muestra la necesidad de avanzar en el control o gestión de estas especies, para proteger la biodiversidad y eso implica erradicar a las especies calificadas como “invasoras”.
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Pérdidas por espinillo
Para valorar económicamente el impacto del espinillo, por ejemplo, se cuantificaron las pérdidas en producción de ganado bovino y en la producción de madera de pino insigne.
Además, se estimó el costo potencial de control de incendios en áreas impactadas por el y los recursos públicos que se han dirigido a investigación.
Esto significa que, de mantenerse la situación actual, en 20 años Chile habrá perdido al menos 48 millones de dólares por la presencia de espinillo.
Pérdidas por jabalí
Con el jabalí se valoraron los impactos a la actividad silvoagropecuaria correspondientes a la producción de avellano europeo, de leche y carne, y a la depredación de semillas de araucaria.
Además, se valoraron impactos sobre el suelo y a componentes de la biodiversidad, alcanzando los 38 millones de dólares anuales en pérdidas a consecuencia de su presencia y 603 millones a 20 años.
Pérdidas por castor
En el caso del castor, el equipo evaluó la pérdida de biomasa forestal, la pérdida en producción ganadera, los recursos públicos invertidos para su investigación y la reparación de infraestructura caminera.
Así, y tomando en cuenta todos los daños generados por la especie, Chile pierde al año $733.094 dólares.
Pérdidas por conejo
Por su parte, el conejo resultó ser la especie más compleja de evaluar dado que la información disponible, y útil para levantar datos, es escasa.
No obstante, el estudio logró estimar en al menos 3.249.337 dólares anuales las pérdidas por la acción del conejo en el ambiente.
El conejo resultó ser una de las dos especies más complejas de valorar dada la escasa información existente útil para propósitos de valoración económica. Pudimos estimar que ya se han gastado al menos $1.465.754 dólares por concepto de erradicación de conejos en islas Chañaral y Choros.
Pérdidas por visón
El visón destacó al ser la especie más compleja en analizar puesto que es una “especie que afecta esencialmente a la biodiversidad y por ello sus impactos resultan intangibles desde una perspectiva económica”, detalló la investigación.
Sin embargo, el equipo investigador armó una propuesta “de valoración basada en el costo potencial de control del visón” además de calcular cuanto ha invertido el Estado en su estudio.
En esa linea, se logró estimar en 8.135.449 dólares anuales el daño que el visón genera en la actividad económica nacional, suma que se dispara a más de 400 millones de la divisa estadounidense en un periodo de 20 años.
Pérdidas por chaqueta amarilla
La Vespula Germánica, comúnmente conocida como chaqueta amarilla, significa un perjucio económico que sobrepasa los 21,5 millones de dólares al año debido a que invade cultivos agrícolas y praderas. Su efecto, en 20 años, quedó estimado en casi 497 millones de dólares
Pérdidas por zarzamora
Finalmente, la zarzamora significa un daño de, al menos, 10 millones de dólares año a año, cifra que llegará a los 273 millones de no controlar a la especie.
Los daños de esta planta, principalmente, impactan a praderas, cultivos agrícolas y forestales.