Poppy es una joven de piel lozana, enormes ojos cafés y cabello platinado que se ha convertido en uno de los fenómenos más inquietantes de internet este último tiempo.
A pesar que creó su canal de Youtube en 2011, desde principios del año pasado la extraña joven comenzó a captar masivamente la atención en la plataforma, sumando un total de más de 97 millones de reproducciones de sus videos. Pero, ¿qué hace Poppy que la hace tan popular?
Los videos de la joven suelen caracterizarse por su suave e infantil voz y por una banda sonora que evoca un sonido cibernético y sintetizado.
Algunos cibernautas han manifestado su intriga, obsesión e incluso temor a la propuesta de la youtuber, la cual produce escalofríos, según expresa parte de sus seguidores.
Casi a diario, Poppy comparte extraños videos en tonalidades pasteles que suelen escapar de la lógica a simple vista.
En ellos, la artista interactúa con sus seguidores con pequeñas preguntas, repitiendo palabras, con diálogos que parecen no tener sentido o simplemente bailando o mirando fijo hacia la cámara.
El primer video de Poppy que se convirtió en viral fue “I’m Poppy”, en el que la youtuber repite por diez minutos “I’m Poppy. I am Poppy” (Soy Poppy, yo soy Poppy). Si bien es de los pocos videos que la artista tiene con tal extensión, es uno de los más famosos en la red, con más de 5 millones y medio de visualizaciones.
Detrás de estas extrañas cápsulas audiovisuales (que mezclan un estilo vaporwave con raíces en Tumblr) está el artista Titanic Sinclair, quien también es compositor y escritor, y suele esconder su nombre y edad al igual que Poppy.
Ambos sugieren que estos videos son una forma de expresión artística diferente, rupturista, que critica con cierto sentido del humor absurdo los vicios y el universo plástico que las redes sociales han creado.
Happy to be back in Tokyo representing @youtube with @thatpoppy #かむおやつ
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A pesar de que Poppy no habla sobre sus datos biográficos porque le ‘parece absurdo centrar la atención en ello’, sí señaló que vive en Nashville (Tennessee, EEUU).
De la intriga a la música
Poppy pasó de ser una muñeca cibernética a en 2016 lanzar su carrera musical. Motivo por el que algunos seguidores creen que la joven creó el primer canal sólo para llamar la atención y facilitar su camino al estrellato.
No obstante, su pequeño EP con cuatro canciones, Bubblebath, se convirtió en un éxito rotundo y no tardó en crear una nueva cuenta en Youtube para compartir sus videoclips, ThatPoppy, además de figurar en Spotify.
La verdad es que Poppy lleva 5 años haciendo música y es ella quien compone todas sus melodías y soundtracks de sus cerca de 200 videos que figuran en la red. La artista, además de cantar, toca piano y guitarra.
Aparte del ámbito musical y sus inquietantes videos, Poppy destaca por su estilo al vestir, donde los colores pasteles son sus preferidos, al igual que la ropa holográfica, los tutús y las referencias de vestuario infantiles.
En una entrevista, Poppy definió su estilo en tres palabras: “Barbie”, “kawai” y “niña”.
Hasta el momento, la youtuber prefiere mantener oculto el número de seguidores en su canal; sin embargo, sólo en Instagram suma más de 373 mil followers.