Lucir una piel sana, hidratada, limpia y sin marcas, es el objetivo que busca la medicina estética para sus pacientes que buscan con obsesión un modelo de perfección entregado por los estándares de belleza.
Es en este contexto que nacen distintos tratamientos de belleza que persiguen la eficacia en el menor tiempo posible y de todas las formas que estén a su alcance.
Uno de los procedimientos estéticos más extraños y nuevos es la inyección de plaquetas, conocida popularmente como la ‘vampiro facial’, la que asegura rejuvenecer el rostro, cuello, escote y manos del paciente.
Un tratamiento con sangre
El ‘tratamiento del vampiro’ consiste en inyectar en la piel del paciente pequeños fragmentos de proteína que se encuentran en las plaquetas, es decir en la sangre.
Según explica el portal médico Efe Salud, estas proteínas son capaces de regenerar y reparar los tejidos, lo que se traduciría como el ‘rejuvenecimiento’ de la piel.
“Estos micro fragmentos proteicos (Factores de Crecimiento Plaquetario) contribuyen a formar el armazón de sostén de la piel: la dermis”, expresa en el portal el médico dermatólogo, Eduardo López Bran.
El creador de esta ‘maravilla’ de la estética es Charles Runels, un dermatólogo cosmético estadounidense que, al cuestionar la eficacia de los tratamientos que ‘estiran la piel’ y considerar el aumento de pacientes jóvenes, decidió innovar y crear el Vampire Facelif (Vampiro facial), refiriéndose a la criatura mítica que bebe sangre, tal como expresó a Real Films.
¿Cómo funciona el ‘tratamiento del vampiro’?
A pesar que para algunos puede resultar perturbador, chocante o incluso le provoque nauseas, el proceso de esta técnica estética es en realidad bastante sencillo.
El primer paso es extraer sangre del paciente. El médico que realice el tratamiento necesita entre 5cc y 10cc de sangre (parecido a lo que se extrae en une examen).
Este líquido siempre debe ser extraído del paciente que se someterá al ‘vampiro facial’ y no debe usarse sangre ajena. El doctor Eduardo López afirma que este punto es esencial para que el tratamiento sea totalmente seguro y no existan riesgos de alergias, infecciones o rechazos, “ya que se utiliza el propio plasma del paciente”
Tras la extracción, el doctor centrifuga la muestra por diez minutos para separar la sangre en dos partes y obtener la proteína.
Para lograr la separación, la muestra se mezcla con cloruro cálcico.
Es así como el líquido que lucía de un solo tono se separa en dos: uno inferior de color rojo (glóbulos rojos) y uno superior color amarillento formado por plaquetas. Es de esta parte de donde se obtienen los fragmentos proteicos, extrayéndose con una pipeta.
Una vez obtenido el líquido, se comienza a inyectar en la piel del paciente (mesoterapia). Se usan pequeñas dosis y varias inyecciones simultáneas con una jeringa circular provista de varias agujas.
También puede realizarse con una sola aguja.
Nouveau traitement PRP ! #prp #plasmaricheenplaquettes #vampirefacelift #cliniquechloé #ccmtl
A post shared by Clinique Chloé (@cliniquechloe) on
La sesión no dura más de media hora y se debe repetir cuatro veces de forma mensual, y luego cada seis meses.
Directo desde EEUU a Chile
Una de las celebridades pioneras en mostrar este tratamiento y popularizarlo fue la empresaria Kim Kardashian. De las manos del inventor del procedimiento, Charles Runels, la celebridad mostró en un show de 2013, “Kourtney & Kim take Miami”, como se realizaba el procedimiento.
Ya han pasado cerca de cuatro años desde ese capítulo y el tratamiento está casi totalmente instalado en Chile. Según muestra el portal de compra de descuentos Groupon, cada sesión de este tratamiento puede costar entre 100 mil y 150 mil pesos, pero puede ser adquirido incluso por 45 mil.
En tanto, algunas personas no dudan en compartir en redes sociales sus mejores selfies durante el ‘vampire facelift’.
A post shared by AUSTIN RYDE (@realaustinryde) on
A post shared by Rebecca Dalton (@skin_cosmetic_clinic) on
A post shared by Adult & Pediatric Dermatology (@adultandpediatricdermatology) on
A post shared by Kerrie Lynch (@kerrielynch_aesthetics) on
Es importante que consultes a tu médico antes de realizarte una extracción de sangre. No se debe realizar este tratamiento a mujeres embarazadas o en época de lactancia.