El presidente de Rusia, Vladimir Putin, confirmó que no asistirá a la próxima cumbre del G20 en Brasil debido a la orden de arresto en su contra emitida por la Corte Penal Internacional (CPI).
Según indicó el jefe del Kremlin, no viajará al encuentro de líderes mundiales que se realizará entre el 18 y 19 de noviembre en Río de Janeiro para así “no entorpecer” el trabajo de la cumbre.
“Comprendemos perfectamente que incluso si echamos de lado lo de la CPI, todos hablarían solo de eso. De hecho impediríamos el trabajo del G20. ¿Para qué?”, señaló Putin en una reunión con jefes de agencias de prensa de los países miembros de los BRICS.
De acuerdo a Agencia EFE, en la instancia el mandatario ruso remarcó tener “relaciones magníficas” y “de amistad” con el presidente de Brasil, Lula da Silva.
Por lo mismo, añadió, no viajará para así “no afectar el trabajo normal” de la cumbre. “Comprendemos todo lo que pasa en torno a Rusia. Y yo también lo comprendo”, puntualizó.
Además de enfatizar que la CPI “no es universal”, remarcó que es una organización internacional “cuya jurisdicción no reconoce Rusia, al igual que muchos otros países del mundo”.
“Creo que Estados Unidos tampoco la reconoce, China no la reconoce, Turquía… Por ello, no considero malo que exista una organización internacional como esta, pero es necesario que sea universal”, puntualizó.
Cabe destacar que en 2023 Lula ya había adelantado que Putin no sería arrestado si aterrizaba en Brasil para la cumbre.
“Creo que Putin puede venir fácilmente a Brasil. (…) Lo que puedo decir es que, si yo soy presidente de Brasil y él viene a Brasil, no hay manera de que lo arresten”, dijo en septiembre del año pasado en entrevista con el medio indio Firstpost.
Recordemos que la CPI emitió en marzo de 2023 una orden de arresto contra Putin por presuntos crímenes de guerra en Ucrania. Específicamente, la Corte acusó a Putin de ser el responsable de la deportación ilegal de niños “y su traslado ilegal desde las áreas ocupadas de Ucrania a la Federación Rusa”.
Esto hizo que Putin se ausentara de varias reuniones de alto nivel, como la cumbre de los BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) organizada en el país africano, o el encuentro de líderes del G20 en Nueva Delhi.
En ambas oportunidades el Kremln envió al ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, para representar los intereses del gobierno ruso.
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