Una nueva variante de covid-19 fue detectada en Sudáfrica, anunciaron las autoridades de dicho país. Sin embargo, su origen aún es desconocido.
“Lamentablemente, hemos detectado una nueva variante que es motivo de preocupación en Sudáfrica”, indicó el virólogo Tulio de Oliveira en una conferencia de prensa.
En total, la B.1.1.529 presenta más de una treintena de mutaciones y algunas de ellas son, según los científicos sudafricanos, motivo de preocupación por su posible impacto en la transmisibilidad y por su potencial capacidad de evadir la inmunidad o protección previa.
“La variante nos sorprendió, tiene un gran salto evolutivo, muchas más variantes de las que esperábamos, especialmente después de una tercera ola de (variante) delta muy severa”, señaló Oliveira. “Podríamos ver potencialmente esta variante expandirse muy rápido”, lamentó este especialista, en base a los datos recogidos en la provincia sudafricana de Gauteng (en la que se encuentran Johannesburgo y Pretoria), donde en los últimos días el número de casos de covid-19 aumentó significativamente.
Los especialistas sudafricanos hicieron hincapié, no obstante, en que la detección de esta nueva variante se ha realizado de manera “muy, muy temprana” y se mostraron optimistas en que esto favorezca el control de su expansión.
Hasta el momento, también ha sido detectada en Botsuana y Hong Kong entre viajeros procedentes de Sudáfrica.
El ministro de Salud, Joe Phaahla, afirmó que esta variante es “muy preocupante”, y es la fuente del aumento “exponencial” del número de casos constatados en el país.
Los contagios se dispararon a más de 1.200 casos el miércoles, contra unos 100 diarios a comienzos del mes en curso.
El año pasado, Sudáfrica detectó la variante Beta, pero actualmente el número de contagios ha repuntado por la Delta, detectada originalmente en India.
Con alrededor de 2,95 millones de casos y 89.657 fallecidos, se trata del país más afectado en el continente africano.
Detectada en Sudáfrica, pero su origen es aún desconocido
El descubrimiento de esta variante se produjo en un análisis el pasado 23 de noviembre, a partir de muestras tomadas entre el 14 y el 16 de noviembre tras un alza del número de casos detectada en Johannesburgo y Pretoria. “No queríamos que esto estuviera merodeando como un rumor”, enfatizó, por su parte, el ministro de Salud sudafricano, Joe Phaahla, en la misma rueda de prensa.
Oliveira indicó también que esperan que la Organización Mundial de la Salud (OMS) dé un nuevo nombre de letra griega a esta variante mañana, al igual que se hizo con el resto; y recalcó que, aunque la B.1.1.529 se haya detectado por primera vez en Sudáfrica, no significa necesariamente que se haya originado en este país austral.