VER RESUMEN

Resumen automático generado con Inteligencia Artificial

Un palestino de 23 años fue asesinado por colonos israelíes en Qalqilya, Cisjordania, en medio de un aumento de violencia que ha llevado a enfrentamientos tanto con tropas como con colonos. Los colonos enmascarados incendiaron casas y vehículos en una aldea palestina, provocando la condena del líder del partido Laborista de Israel. La Media Luna Roja atendió a un joven palestino herido con disparos en el pecho, mientras que la OCHA documentó 25 ataques de colonos la semana pasada. La violencia ha cobrado la vida de 290 palestinos en 2024, incluidos milicianos y civiles, mientras que el Ejército israelí ha matado a 633 palestinos en incidentes violentos desde octubre.

Desarrollado por BioBioChile

Un palestino de 23 años fue asesinado este jueves por colonos israelíes, que le dispararon con armas de fuego, en el área de Qalqilya, norte de Cisjordania ocupada, en donde se vive el mayor peak de violencia en dos décadas, no solo por enfrentamientos con tropas, sino también con colonos.

El Ministerio de Sanidad de Gaza identificó a la víctima como Rashid Mahmud Sadda, de 23 años, mientras que otro joven palestino está gravemente herido con heridas en el pecho.

Unos 50 colonos israelíes enmascarados invadieron la aldea palestina de Jit, incendiando al menos cuatro casas y seis vehículos, según medios hebreos.

“El terrorismo judío mesiánico está decidido a incendiar el territorio y a imponer una campaña regional difícil e innecesaria sobre Israel”, condenó el líder del partido Laborista de Israel, el izquierdista Yair Golan.

La agencia oficial de noticias palestina Wafa informó de que colonos armados entraron en esa aldea, incendiando varios vehículos y abriendo fuego contra varios palestinos, matando a uno e hiriendo a otro.

La Media Luna Roja palestina atendió al herido por disparos en el pecho y lo trasladó al hospital Rafidia de Nablus, donde su estado fue catalogado como crítico.

La violencia de los colonos contra los palestinos y sus propiedades se ha convertido en habitual en Cisjordania, que suele incluir incendios, lanzamiento de piedras, arranque de cultivos y olivos y ataques poblados vulnerables, y rara vez es perseguida por las autoridades israelíes.

En la última semana (del 6 al 12 de agosto), la agencia de la ONU para asuntos humanitarios (OCHA) ha documentado 25 ataques de colonos causando seis heridos palestinos, incluidos dos niños.

Desde el 7 de octubre, cuando comenzó la guerra en la Franja de Gaza, la OCHA ha registrado unos 1.250 ataques de colonos israelíes contra palestinos, 120 de ellos causando más de una decena de muertos.

Más de 700.000 colonos viven en Cisjordania ocupada, incluyendo Jerusalén este, y en lo que va de año el gobierno israelí, donde la extrema derecha colona tiene amplio poder, ha autorizado numerosos planes de expansión de asentamientos, legalización de puestos de avanzada y amplias confiscaciones de tierras.

Además, dos palestinos murieron también este jueves en Cisjordania, por el ataque con un dron por parte del Ejército israelí sobre el campo de refugiados de Balata, en Nablus; el cuarto ataque de estas características en la zona en menos de dos semanas, matando a un total de 16 palestinos, la mayoría milicianos.

Cisjordania ocupada vive su mayor espiral de violencia desde la Segunda Intifada (2000-05), y en lo que va de 2024 al menos 290 palestinos han muerto por fuego israelí, la mayoría milicianos o atacantes pero también civiles, incluidos unos 70 menores -según el recuento de EFE-, tras cerrar 2023 como el año más letal en dos décadas con más de 520 muertos.

El Ejército israelí intensificó sus ya frecuentes incursiones en Cisjordania tras el ataque de Hamás del 7 octubre y, desde entonces, han muerto 633 palestinos en incidentes violentos con Israel -147 menores-, principalmente con tropas y una decena de ellos a manos de colonos.

Del lado israelí, murieron este año 21 personas: 11 uniformados y diez civiles, cinco de ellos colonos.