La milicia proiraní Resistencia Islámica de Irak se atribuyó este martes la responsabilidad del ataque contra la base de Ain al Assad, situada en el oeste de Irak y utilizada por la coalición internacional que encabeza Estados Unidos.
SITE Intelligence Group, un organismo especializado en hacer seguimiento de los grupos terroristas, indicó en un comunicado que una unidad de la milicia ha reclamado la autoría del ataque que dejó al menos cinco heridos.
El Ejército de Irak condenó “en los términos más enérgicos” el ataque y rechazó todas aquellas acciones “imprudentes” que “pongan en peligro las bases iraquíes, las misiones diplomáticas y lugares utilizados por la coalición internacional” ya que, en última instancia, esto puede aumentar las tensiones en la región.
El Mando de Operaciones Conjuntas iraquí detalló este martes que dos cohetes tipo Katyusha fueron lanzados desde un vehículo en el distrito de Haditha que posteriormente fue interceptado y que contenía otros ocho proyectiles que estaban preparados para su lanzamiento, según recoge la agencia de noticias INA.
El ataque se produce en un momento de máxima tensión en la región por el reciente bombardeo de Israel contra un cuartel del partido-milicia chií libanés Hezbolá en Beirut en el que murió un alto comandante del grupo, así como la muerte del que fuera líder del Movimiento de Resistencia Islámica Hamás tras un ataque atribuido a Israel en la capital de Irán, Teherán.