Miles de personas despidieron este viernes al jefe del buró político de Hamás, Ismail Haniyeh, en un multitudinario funeral en Doha al que asistieron las altas esferas de la familia real de Qatar e importantes funcionarios de Turquía, que procuraron no ser el centro de atención durante la ceremonia.
La televisión qatarí Al Jazeera informó que el emir de Qatar, Tamim bin Hamad Al Thani y su padre, Hamad bin Jalifa Al Thani, además del primer ministro y ministro de Exteriores qatarí, Mohamed bin Abderrahmán, acudieron a la ceremonia celebrada en la mezquita Mohamed bin Abdelwahab, la más grande de este estado árabe.
También asistieron altos cargos del Gobierno de Turquía, como el ministro de Exteriores, Hakan Fidan, el vicepresidente y el presidente del Parlamento turco; además de delegaciones diplomáticas de Pakistán y Malasia, de acuerdo con la cadena.
Asimismo, representantes de Hamás, Fatah y la Yihad Islámica Palestina también participaron en una muestra de unidad en las oraciones para despedir a Haniyeh, asesinado hace dos días en Teherán en un ataque ampliamente atribuido a Israel que, sin embargo, no lo ha reivindicado.
El miembro del buró político de Hamás Jalil al Hayya encabezó una breve oración frente al ataúd de Haniyeh, que envuelto en la bandera palestina fue sacado de la mezquita en una multitudinaria procesión para su entierro en el Cementerio del Imán Fundador de la localidad de Lusail, al norte de Doha.
“Estamos seguros de que su sangre traerá la victoria, dignidad y liberación”, transmitió Al Hayya a los familiares del difunto, de acuerdo con Al Jazeera.
Un funeral “sin precedentes”
Miles de personas acudieron desde primera hora de la mañana a la mezquita Mohamed bin Abdelwahab de Doha, con capacidad para acoger a unas 30.000 personas, para presenciar lo que medios qataríes calificaron como un funeral público y oficial “sin precedentes” en el pequeño país del golfo Pérsico.
De hecho, cientos de personas se quedaron sin poder acceder al templo y se tuvieron que refugiar bajo puentes cercanos para escuchar las oraciones sin sufrir las consecuencias de las abrasadoras temperaturas de 43 grados en Qatar.
Las figuras políticas que acudieron a la ceremonia, sin embargo, mantuvieron un perfil bajo y apenas aparecieron ante las cámaras, al contrario de las exequias celebradas ayer en Teherán, donde participaron las principales autoridades de Irán.
Los Gobiernos árabes, además, tampoco se pronunciaron durante el funeral, marcado por un intenso clima de tensión en Oriente Medio y a la espera de una anunciada respuesta por parte de Irán, el grupo chií libanés Hezbolá y los rebeldes hutíes del Yemen contra Israel, a quien acusan de asesinar a Haniyeh y de acabar con toda expectativa de tregua en Gaza.
“El hecho de que el hermano Estado de Qatar y sus dirigentes hayan acogido la ceremonia fúnebre de Ismail Haniyeh en estas difíciles circunstancias es una posición noble y apreciada”, escribió en X el asesor diplomático del presidente de Emiratos Árabes Unidos, Anwar Gargash, que trasladó su pésame a la familia del fallecido.
Durante la procesión del féretro de Haniyeh, a la salida de la mezquita, decenas de personas corearon lemas como “Palestina libre”, en medio de un fuerte dispositivo policial que estuvo desplegado en la capital qatarí durante toda la ceremonia.
El líder de Hamás fue enterrado en el Cementerio del Imán Fundador en presencia solo de familiares, de cargos políticos y de la familia real de Qatar, país en el que Haniyeh residió desde 2019 y que también acoge la oficina política del grupo islamista.
La muerte del palestino, además, marcó este viernes las oraciones del día sagrado de los musulmanes en varios países de Oriente Medio, donde los imanes le dedicaron unas palabras al “mártir” y también lanzaron amenazas contra Israel.