Sorpresa generó el repentino fallecimiento del presidente de Irán, Ebrahim Raisí, quien perdió la vida en un accidente de helicóptero en la provincia de Azerbaiyán Oriental.
Vladimir Putin, Xi Jinping y el alto representante de la UE, Josep Borrell, han reaccionado ante la muerte del líder iraní.
En tanto, un amplio pesar se ha reportado entre los países árabes por la tragedia en la que también falleció el ministro de Exteriores, Hosein Amir Abdolahian.
El Gobierno libanés, por ejemplo, decretó tres días de luto oficial por la muerte de Raisí, mientras que Bachar al Asad, presidente de Siria, expresó sus condolencias y agradeció al fallecido líder por su labor para fortalecer los lazos entre ambos países.
Sin embargo, una de las reacciones más sentidas corrió por cuenta de Hezbolá, estrecho aliado de Teherán.
“Para nosotros era un hermano mayor, un fuerte partidario y un firme defensor de nuestra causa, y de la causa de la nación, especialmente de Jerusalén y Palestina”, señaló la agrupación terrorista en un comunicado.
“Fue un protector de los movimientos de la Resistencia y de sus muyahidines en todos los puestos de responsabilidad que ocupó”, agregó el grupo.
Tal como detalla Agencia EFE, Hezbolá forma parte de la alianza informal antiisraelí liderada por Irán conocida como “Eje de la Resistencia”.
Se trata de una coalición conformada por organizaciones militantes como los rebeldes hutíes, el movimiento islamista Hamás, la Yihad Islámica y milicias en Irak, entre otros grupos.
Si bien Teherán reconoce sus conexiones con estos grupos, niega firmemente que actúen bajo su mando directo, afirmando que estas organizaciones toman sus propias decisiones de manera independiente.
Nombran a presidente interino
Tras la muerte de Raisí, el líder supremo de Irán, Ali Jameneí, aprobó el nombramiento del vicepresidente primero, Mohamad Mojber, como presidente interino del país.
A su vez, declaró cinco días de luto nacional por la muerte del presidente de Irán.
“Según el artículo 131 de la Constitución, el señor Mojber está en la posición de dirigir el poder ejecutivo y está obligado a acordar con los jefes de los poderes legislativo y judicial la elección de un nuevo presidente en un plazo máximo de cincuenta días”, indicó Jameneí, de acuerdo a la agencia estatal IRNA.