Siete trabajadores humanitarios extranjeros afiliados a la organización WCK fallecieron la madrugada del martes en un ataque aéreo israelí en el centro de Gaza, según informan medios palestinos y confirmó a EFE un trabajador de la organización en el enclave.
Se cree que se trata de los primeros trabajadores humanitarios extranjeros asesinados en la guerra de Gaza desde el 7 de octubre, y que ya se ha cobrado más de 32.800 víctimas, la mayoría mujeres y niños.
“Por desgracia, en el último día hubo un caso trágico en el que nuestras fuerzas alcanzaron de forma no intencionada a gente inocente en la Franja de Gaza”, dijo Netanyahu en un mensaje de agradecimiento al equipo sanitario que le operó de una hernia el lunes, después de recibir el alta.
El primer ministro reiteró que el suceso será investigado de forma exhaustiva, y defendió que este tipo de cosas “suceden en la guerra”. “Haremos todo lo posible para que no vuelva a suceder”, añadió.
Poco antes, el Ejército israelí anunció que será una entidad militar independiente, el Mecanismo de Investigación y Evaluación de Hechos, el que investigará el ataque, que ha llevado a la ONG a suspender sus operaciones en la región.
El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), Daniel Hagari, explicó en un mensaje que ha hablado personalmente con el chef José Andrés, fundador del grupo humanitario, para expresarle sus condolencias por las muertes de los trabajadores.
Los cuerpos de las víctimas, cubiertos por chalecos antibalas negros con el logo de WCK y casco de protección, según muestran fotografías difundidas en redes sociales, fueron trasladados al Hospital Mártires de al Aqsa en la misma ciudad de Deir al Balah, de acuerdo con fuentes médicas.
El ejército israelí informó en un comunicado “estar realizando una revisión exhaustiva al más alto nivel para comprender las circunstancias de este trágico incidente”, y reiteró que han trabajado “estrechamente” con WCK -fundada por el aclamado chef español afincado en EE.UU. José Andrés- para repartir alimentos y ayuda humanitaria en Gaza.
La ONG estadounidense World Central Kitchen participó el pasado 15 de marzo en la llegada a Gaza de 200 toneladas de alimento y agua, inaugurando un corredor marítimo a bordo del barco del Open Arms, y pese a los llamados de la comunidad internacional y otras organizaciones humanitarias de que solo la llegada masiva de alimento por tierra conseguirá paliar una hambruna inminente en Gaza.