Un oficial de la Guardia Revolucionaria de Irán murió el lunes y otras cuatro personas resultaron heridas como consecuencia de un bombardeo israelí en una localidad próxima a Damasco, la capital siria, según informaron diversas fuentes.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos, una ONG con sede en el Reino Unido y una amplia red de colaboradores sobre el terreno, afirmó en un comunicado que “los ataques israelíes tenían como objetivo una figura de alto rango, sin información confirmada aún sobre su suerte”, añadiendo que otros cuatro individuos resultaron heridos en el incidente.
La agencia de noticias oficial iraní, Mehr, confirmó que el fallecido es Seyyed Razi Mousavi, “un destacado asesor militar del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) en Siria”, que murió en un ataque aéreo atribuido a Israel en la zona de Sayyida Zeinab, en la gobernación rural de Damasco.
Según el Observatorio, “los misiles israelíes atacaron dos emplazamientos de la milicia libanesa Hizbulá (respaldada por Irán), cercanos al departamento de guerra electrónica del régimen sirio”.
De hecho, los bombardeos israelíes habitualmente van dirigidos contra zonas en las que está presente el grupo chií libanés Hizbulá, aliado del Gobierno sirio y que desde el pasado 8 de octubre está enzarzado en intensos ataques cruzados con Israel desde el sur del Líbano.
Sin embargo, Israel ya solía atacar con anterioridad objetivos en la nación árabe, muchas veces pertenecientes a milicias iraníes o libanesas aliadas de Damasco, que considera una amenaza para su seguridad.
Desde principios de 2023, el Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha contado 70 ataques israelíes contra 138 objetivos en territorio sirio, como depósitos de municiones, cuarteles generales, centros y vehículos, que provocaron la muerte de 116 militares, además de herir a otros 130.