El comandante del grupo islamista palestino Hamás, Muhamad Qatmash, quien se desempeñaba como jefe de la división de artillería, resultó muerto en un bombardeo en la Franja de Gaza, informó este domingo el Ejército israelí.
Según un comunicado militar, Qatmash desempeñó un papel importante en la planificación y ejecución de lanzamientos de cohetes dirigidos contra Israel.
Desde el ataque de Hamás el pasado 7 de octubre, en el que murieron 1.400 personas y fueron secuestradas más de 200, la fuerza aérea israelí ha intensificado los ataques contra Gaza, en el marco de un plan de guerra dividido en tres fases.
De acuerdo con la información publicada en medios israelíes, las tres fases de esa operación militar en Gaza consistirían en bombardeos contra objetivos de Hamás, como centros de mando y control; incursiones específicas de pequeñas unidades de infantería al otro lado de la frontera para neutralizar comandos o cabecillas del grupo armado; y finalmente, la operación terrestre a gran escala, cuyo comienzo sigue siendo una incógnita.
Se intensifican los bombardeos en Gaza
La Fuerza Aérea israelí ha seguido atacando objetivos de Hamás en la Franja de Gaza desde esta mañana, cuando fueron bombardeados un taller de fabricación de armas y un centro de mando militar del grupo islamista palestino, informó el Ejército.
Israel ha intensificado los bombardeos sobre Gaza en las últimas 24 horas y su aviación mató anoche a dos milicianos de alto rango de Hamás junto a otros combatientes, mientras sigue atacando “decenas de objetivos terroristas”, según fuentes militares. A su vez, más de 110 palestinos han muerto desde ayer por los ataques.
En una rueda de prensa este domingo, el portavoz militar israelí, Daniel Hagari, aseguró que el Ejército aceleró el ritmo de ataques sobre Gaza, mientras la región entra hoy en el decimosexto día de guerra.
Hagari volvió a instar a los civiles palestinos que quedan en el norte de la Franja a evacuar al sur para su seguridad, donde se desplazaron ya 1,4 millones de gazatíes. Pero otros cientos de miles decidieron no irse de la zona norteña, pese a la advertencia que el Ejército israelí hizo la semana pasada.
Desde que la guerra estalló hace más de dos semanas, más de 4.400 personas han muerto en Gaza por bombardeos israelíes, entre las cuales cerca del 70% son menores de edad, mujeres y ancianos.